Rubí Velázquez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Desesperada al ver como la salud de su hijo se consumía, Chantal decidió junto con su esposo vender lo último que les quedó tras el paso del huracán Wilma en el 2005, para continuar con los estudios y médicos hasta encontrar la razón del estado crítico de su hijo.

Luego de muchos estudios, para Chantal la vida dio un giro de 180 grados, cuando diagnosticaron que su pequeño Joel de ocho años de edad, salió positivo al Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) y que sin saberlo ella transmitió desde el vientre.

Inicia una prueba de vida 

Lo que siguió a decir de la madre, fue la prueba más grande que la vida le puso a su familia, para comprobar si el amor, la fe y la resistencia, lograban erradicar la culpa, el reproche y la negación, que sentía junto con su esposo, a su parecer el causante número uno la situación.

Al comenzar el tratamiento con retrovirales, les recomendaron en su clínica familiar que acudieran a algún grupo de ayuda o psicológico, a fin de lograr la aceptación y el manejo adecuado de la enfermedad, comentó Chantal, es por ello que se acercó a Aprendiendo a Vivir con VIH SIDA A.C., donde logró asimilar la enfermedad, llevar un tratamiento adecuado y donde hace dos años encontró la fuerza para sobreponerse a la pérdida de su esposo y enfrentar la enfermedad junto con su hijo Joel quien cursa la preparatoria y tiene 16 años.

Ayudan a enfermos de VIH

Aprendiendo a Vivir con VIH A.C., se constituyó legalmente en 1998 y actualmente trabajan terapias de asimilación, ocupacionales, talleres de nutrición y manejo de la enfermedad para personas infectadas, además de pláticas de prevención con escuelas y la instalación de módulos de atención para la realizan de pruebas de detección rápidas de VIH, donde se aplican alrededor de 500 exámenes cada tres meses, todo ello con la finalidad de erradicar la discriminación y las muertes a causa del virus, destacó Alejandra Hernández Lara, representante legal de Aprendiendo a Vivir A.C.

La asociación civil trabaja con alrededor de 67 familias quienes acuden directamente al lugar ubicado en calle Ticimul, número 26, manzana 3, súper manzana 59, afirmó Hernández Lara.