A seis meses de que dos hombres demandaran a Madonna por iniciar tarde sus conciertos en Nueva York, se ha dado a conocer que desestimaron la denuncia de manera voluntaria. La información fue obtenida por TMZ, donde se reveló que Michael Fellows y Jason Alvarez decidieron retirar la demanda sin llegar a un acuerdo con la cantante.

Fellows y Alvarez acusaron a la intérprete de "Vogue" de incumplir contratos con los compradores de boletos, así como de publicidad engañosa y prácticas comerciales desleales. Los demandantes argumentaron que Madonna violó la Ley General de Negocios 149 del estado de Nueva York al iniciar sus conciertos más tarde de lo anunciado.

Según los documentos legales, los afectados afirmaron que los horarios de inicio tardíos por parte de la artista contravenían las leyes estatales. La demanda se centraba en un espectáculo ofrecido en enero, donde los demandantes consideraron que la artista no cumplió con los términos acordados al retrasar el inicio del concierto.

Recientemente, Madonna justificó haber comenzado su Celebration Tour en Nueva York con dos horas de retraso el pasado 13 de diciembre. La cantante explicó que para un verdadero fanático, estos retrasos son habituales.

"Si un fan está lo suficientemente familiarizado con la historia de los conciertos de Madonna como para saber que sus actuaciones duran dos horas y quince minutos, ese fan seguramente sabrá que Madonna normalmente sube al escenario mucho después de la hora del evento para el que se ha reservado la entrada y toca hasta bien entrada la noche",

reza un documento legal.

Hasta el momento, la Reina del Pop no ha emitido ningún comentario sobre la desestimación de la demanda, con lo que se cierra el curioso caso.

Sin embargo, sus seguidores ya están acostumbrados a sus retrasos y parecen aceptarlo como parte de la experiencia de asistir a sus presentaciones.

(Con información de Reforma)