Para incentivar el cultivo del chile habanero en Yucatán, el cual tuvo una caída considerable durante los últimos dos años por la pandemia del coronavirus, el Consejo Estatal de Productores del picante busca que más jóvenes se involucren en esta industria la cual, por medio de mejores procesos de certificación y exportación, podrían ayudar a reforzar al campo yucateco.

El presidente de dicho consejo en el Estado, Freddy Ríos Urcelay, destacó que por fortuna las nuevas generaciones de productores ya se han preparado más y se han dado cuenta de que el asunto de las certificaciones y la producción con calidad ya no representa un gasto, sino una inversión.

Por ello, refirió que el consejo estatal ha promovido el cultivo del chile habanero como un buen negocio para que los jóvenes se interesen en ello y puedan seguir con la industria, apoyados de la experiencia que tienen quienes se dedican a cultivar este producto desde hace varios años.

En entrevista con Novedades Yucatán, Ríos Urcelay reiteró que más jóvenes se interesan por este cultivo, pues se han percatado que sí es un buen negocio, pues si se logran eliminar los intermediarios y se trabajan en los mercados y plataformas cibernéticas se deja a un lado el “coyotaje” y las ganancias son mayores para los productores.

Agregó que luego de dos años de la pandemia, la producción se ha sostenido y han mantenido la cantidad de toneladas. 

Antes de pandemia

Antes de la pandemia del Covid-19, el padrón de productores de chile habanero era de entre 800 y 850 en el Estado; sin embargo, en la actualidad, el 50 por ciento de ellos sigue con la producción para comerciar.

Yucatán ya cuenta con el primer agricultor (“Milpa Maya”) que exporta el producto con la denominación de origen, lo que representa un aliciente para que las nuevas generaciones se dediquen al cultivo de la planta.

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