El narcotráfico en México está adoptando estrategias cada vez más sofisticadas para fortalecer su operación, transformándose en verdaderas organizaciones corporativas.

Según un reportaje de The New York Times, el Cártel de Sinaloa, principal responsable de la crisis de fentanilo en Estados Unidos, está reclutando estudiantes de química con tácticas que incluyen infiltración en universidades y promesas económicas tentadoras.

Él prestigiado The New York Times, en su prima plana de hoy “los cárteles mexicanos como el de Sinaloa están reclutando estudiantes de química de universidades para trabajar como “cocineros” de fentanilo 💊”. Los jóvenes son investigados a fondo antes de ser contactados. pic.twitter.com/r0b9qtzrbA

— Ramírez Martínez José (@RamrezMartnJos1) December 2, 2024 

De acuerdo con el artículo titulado “Cómo los cárteles mexicanos reclutan estudiantes de química para fabricar fentanilo”, los reclutadores se valen de redes familiares, investigaciones previas al contacto y hasta manipulaciones emocionales. Un caso destacado narra cómo un reclutador disfrazado de conserje abordó a un estudiante universitario con la promesa de un futuro lucrativo. 

Las universidades, debido a su carácter abierto y escasa regulación, se han convertido en terreno fértil para identificar talento. Incluso algunos profesores han señalado que ciertos estudiantes asisten a clases únicamente para adquirir conocimientos aplicables en la fabricación de drogas sintéticas. 

Técnicas del Cártel de Sinaloa para reclutar estudiantes de química

Además de los incentivos económicos que duplican o triplican el salario promedio de un químico formal, los reclutadores apelan a necesidades emocionales. Historias como la de un joven que accedió a trabajar para pagar el tratamiento médico de su padre reflejan la dimensión humana detrás de estas dinámicas. 

Este modelo, descrito por un reclutador como “inversión en los mejores perfiles”, tiene implicaciones internacionales. De lograr la síntesis de precursores químicos sin depender de insumos chinos, el cártel podría aumentar su control sobre la producción de fentanilo, complicando los esfuerzos para combatir la crisis de opioides. 

La revelación de estas tácticas plantea interrogantes sobre las medidas de seguridad en las instituciones educativas y el impacto de la precariedad económica en los jóvenes, evidenciando cómo el narcotráfico sigue evolucionando frente a los desafíos globales. 

(Con información de Infobae)