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Ciudad de México.- Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la coalición Juntos Haremos Historia, señaló que de ganar las elecciones del 1 de julio próximo llevará a cabo un cambio profundo en México, arrancará de raíz la corrupción y fortalecerá el mercado interno.

Durante el acto de campaña que realiza en el norte del país, reiteró que terminar con este flagelo hará renacer al país, le dará viabilidad, se entrará a una nueva etapa, que cambiará la imagen de México ante el mundo, informa la agencia Notimex.

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Ante sus seguidores, destacó que se obtendrán recursos para financiar el desarrollo, sin necesidad de aumentar impuestos y endeudar al país; rescatar al campo, apoyar a los productores, fijar precios de garantía; “ya no compraremos en el extranjero alimentos, vamos a producir lo que consumimos”.

Igualmente, el candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) y los partidos del Trabajo (PT), y Encuentro Social indicó que se producirá la gasolina necesaria en el territorio nacional y se bajarán los precios de los combustibles.

López Obrador destacó que se va a “reconfigurar las seis refinerías que tenemos para que operen en toda su capacidad y vamos a construir dos grandes refinerías”, para dar todo el valor agregado a "nuestra materia prima, vamos a producir aquí la gasolina; y vamos a bajar los precios de los combustibles”.

También se comprometió a terminar con los denominados “huachicoleros”, al tiempo que reiteró su compromiso para terminar la corrupción en el país, pues no solo es una cuestión moral sino que el dinero que se obtenga será empleado en el desarrollo del país, “vamos a entrar en una etapa nueva, distinta”.

Al término del encuentro, en entrevista, señaló que por su parte no reprocha al obispo de Chilapa, Guerrero, Salvador Rangel Mendoza, luego de revelar que se reunió con un líder del crimen organizado, ya que, dijo, “conozco la situación tan difícil que están viviendo en la Montaña de Guerreo; donde hay mucha violencia”.