Mexicanos arrestados en Brasil, cerca de la libertad bajo fianza
Según el abogado de los exfuncionarios panistas acusados de 'lesiones graves', podrían salir libres este viernes, pero quedarían bajo arraigo.
Agencias
MÉXICO, D.F.- Sergio Eguren y Rafael Medina, ex funcionarios de la delegación Benito Juárez que fueron detenidos junto con otros dos mexicanos en Brasil, podrían salir de la cárcel a más tardar este viernes y obtener un arraigo domiciliario, dijo su abogado defensor Xavier Olea.
Los dos mexicanos viajaron a Brasil en el marco de sus vacaciones para poder disfrutar el Mundial de futbol.
En entrevista radiofónica con Ciro Gómez Leyva, la defensa legal de los panistas dijo que sus clientes deberán pagar una fianza para salir del penal ubicado en el municipio de Pacatuba, a donde los llevaron luego de que fueron detenidos en Fortaleza acusados de realizar tocamientos a una mujer y de propinar una golpiza a su esposo tras el partido de México contra Holanda, el 30 de junio.
"El procedimiento aquí en Brasil, en primer lugar la resolución no fue de un juez, sino del fiscal; aquí en Fortaleza, por ejemplo, el delito de lesiones no se puede establecer hasta dentro de los 30 días siguientes, el día de ayer faltan tres semanas para esos efectos", explicó.
Sin embargo, detalló, con un "hábeas corpus (figura jurídica para evitar los arrestos y detenciones arbitrarias) un magistrado de Fortaleza pudiera dejarlos en libertad provisional, tendrían que pagar una fianza y quedarse como arraigados en Brasil".
Según Milenio, el abogado dijo que en el expediente de los panistas no se reporta ningún tipo de tocamiento y que el delito es por "lesiones graves".
Costilla rota
"Aquí el Ministerio Público te puede meter a la cárcel previo al juicio y eso es lo que pasó y las lesiones no se pueden calificar como graves hasta los 30 días siguientes", dijo.
Xavier Olea señaló que están bien tres de los cuatro mexicanos a quienes defiende, entre ellos los dos panistas; pero acusó que Sergio Eguren tiene una costilla rota, luego de que policías le dieran un toletazo.
El abogado informó que los mexicanos están en una zona separada de la población general de la cárcel, ya que las autoridades temen que los presos los pudieran agredir.
Olea declaró hace unos días que los exfuncionarios mexicanos eran víctimas de personas influyentes de Brasil.