Los mataron sustancias que debían protegerlos

Los dos menores fallecidos por vacunas del cuadro básico en Chiapas vivían en una población 'de alta marginación'.

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Las familias se negaron a que los médicos realicen la autopsia para determinar la causa de muerte de los menores. (CNN)
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Ángeles Mariscal/CNN
SIMOJOVEL, Chiapas.- Había cumplido 30 días de nacida y la iban a llamar Yadira. Sin embargo la niña, uno de los dos menores que murió el pasado viernes 8 de mayo por la aplicación de vacunas del IMSS, no tenía una identidad oficial. Su nacimiento no había sido registrado y no formaba parte de ningún indicador demográfico o poblacional.

En la localidad La Pimienta, ubicada en un cerro árido devastado por la extracción minera y la sobreexplotación de cultivos de maíz, los padres de los casi 1,000 niños del lugar tardan años en registrarlos. No se encuentran en ningún índice oficial. Muchos de ellos nacen en sus casas, atendidos por parteras.

En La Pimienta, donde personal del programa IMSS Prospera llegó a aplicar el Programa Nacional de Vacunación, no hay hospitales, no hay clínicas, apenas hay un centro de salud comunitario que forma pate de los centros de salud del programa IMSS Prospera, pero que está compuesto por un par de cuartos de bloque de cemento y techo de lámina, y un cobertizo donde ocasionalmente se sientan los pobladores, para recibir alguna consulta, “cuando le toca llegar al médico”.

En el interior del inmueble, en unas repisas polvorientas, algunos frascos de paracetamol y otras pastillas componen todo el botiquín de medicamentos. Unas sillas y mesas el mobiliario.

La Pimienta es una de las 124 comunidades que componen el municipio de Simojovel, un municipio catalogado por las autoridades como de "alta marginación" y conocido a nivel internacional por el ámbar que se obtiene de sus minas y que, convertido en joyas, deja miles de pesos a los intermediarios que lo comercializan.

Pero a Beralaín González Penagos, de 22 años, padre de Yadira, quien se dedica a la extracción, el ámbar no le deja lo suficiente para sobrevivir, ni siquiera para pagar el servicio médico para su familia.

Pocos médicos

En Simojovel, de acuerdo a las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), 4 de cada 10 personas no tienen acceso a ningún servicio de salud. Y los poco más de 24,000 pobladores que cuentan con algún tipo de asistencia médica del sector público -estatal o federal- deben esperar a ser atendidos por alguno de los 32 médicos designados al municipio.  

La situación de Vicente López Gómez, de 33 años de edad, padre de cinco hijos, tampoco es diferente a la de Beralaín. Su hijo Emmanuel Francisco tenía 28 días de nacido cuando le aplicaron las vacunas del cuadro básico.

El viernes 8 de mayo, a través de un aparato de perifoneo, anunciaron en la comunidad que personal médico del IMSS Prospera aplicaría vacunas a los recién nacidos. Su esposa Amalia Hernández, de 30 años de edad, acudió con su hijo en brazos. Esperó varias horas hasta que aproximadamente a las 13:30 horas le aplicaron las vacunas a Emmanuel Francisco.

Al poco tiempo empezó la fiebre, el adormecimiento interrumpido por las convulsiones y síntomas que los papás de los niños afectados, describen como signo de un dolor intenso en la cabeza de sus hijos.

Tras su muerte y la denuncia por lo sucedido, autoridades de Simojovel regalaron a las dos familias los féretros para enterrar a sus hijos. Indignados por lo sucedido, los padres no dejaron que el personal médico que llegó a la comunidad le realizara la autopsia a los niños. Este domingo los sepultaron en el panteón de la comunidad.

Quedan 24 hospitalizados

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó que debido a su mejoría, tres niñas y dos niños fueron dados de alta del hospital “Dr. Gilberto Gómez Maza, luego de presentar reacciones adversas asociadas a la aplicación de vacunas.

En un comunicado, la institución puntualizó que estos cinco niños continuarán en observación médica en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez por las siguientes 72 horas.

De los 24 menores que permanecen hospitalizados, 18 están estables y seis se encuentran graves, por lo que el IMSS y la Secretaría de Salud del estado colaboran para otorgarles atención médica.

Detalló que se está otorgando información individualizada sobre la evolución del estado de salud de los niños, en algunos casos por medio de un intérprete.

La investigación sobre este suceso continúa, toda vez que la víspera se trasladaron los frascos de las vacunas para ser analizados por personal de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) y de la Secretaría de Salud.

Estrategia efectiva

Asimismo, el IMSS ya localizó y resguardó de manera preventiva todos los envases adicionales del lote de vacuna de Hepatitis B. Explicó que la suspensión temporal de la vacunación es solo respecto de los lotes de vacunas identificados en el municipio de Simojovel, correspondientes a la referida vacuna.

“Las campañas de vacunación han demostrado ser una de las estrategias de salud pública con mayor efectividad para disminuir la presencia de enfermedades prevenibles en la población, por ello, el resto de la campaña de vacunación sigue realizándose en el Instituto de manera normal”, afirmó.

Asimismo, recordó que el IMSS, la Secretaría de Salud y el Gobierno del estado de Chiapas se mantienen en estrecha comunicación y colaboración para informar de manera puntual y oportuna sobre este caso.

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