Pareja le da la bienvenida al público a sus campos de cempasúchil

‘Campo de Flores Don Mateo’ tiene un significado especial para Dora Elia y su esposo, Mateo.

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Pareja le da la bienvenida al público a sus campos de cempasúchil. (Foto: Reforma)
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Dora Elia Saucedo y Mateo Bautista son un matrimonio de Monterrey que año con año, esperan la llegada de muchas personas a sus campos llenos de hermosas flores de cempasúchil.

Ambos trabajan todo el años para que en esta temporada, sus tierras estén cubiertas de las flores representativas del Día de Muertos y de mano de león, una flor aterciopelada de tonalidades violeta, que regala un paisaje único entre montañas, en el municipio de García.

Con 65 años y estudios hasta la primaria, Dora y Mateo laboran desde hace varias décadas en tres hectáreas de la comunidad La Candelaria, en el ejido Rinconada. El lugar es conocido como ‘Campo de Flores Don Mateo’.

UNAS FLORES CON MUCHO SIGNIFICADO

“Con mucho orgullo le digo que no nos cansamos de sembrar estas bellas flores y seguir adelante”, expresa Dora Elia. “Uno, porque es muy bello todo esto, sembrarlo es muy bonito, nos fascina. Y otra, de aquí comemos, es el sustento de todo el año”. 

Hace ocho años abrieron el espacio al público previo al Día de Muertos. Aquellas personas que asisten a sus campos, tienen la oportunidad de oler y sentir una de las flores más importantes de México.

La siembra del cempasúchil y mano de león comenzó hace tres meses, cuando trajeron las semillas de la Ciudad de México y del estado de Hidalgo. 

Esta historia inició hace muchos años con Dora Elia, originaria de Laguna de Sanchez y su esposo Mateo, quien creció en una colonia de Santa Catarina.

“Andábamos en una fiesta y ahí nos conocimos”, relata la mujer.

Tras casarse, Dora Elia aceptó irse a vivir con él a Rinconada para trabajar estas tierras, propiedad de su suegro, Bonifacio Bautista.

"Mi suegro le dejó la tierra a mi esposo. Nosotros juntos hemos luchado y hemos salido adelante: lo poco o mucho que tenemos ha salido de nuestra parcela".

A lo largo del año, ambos también siembran ajo, cebolla, cilantro, acelgas, repollo y calabazas. En estas tierras además hay flor de crisantemo en color amarillo. En otras temporadas tienen blancas y moradas. 

Son flores de otoño comúnmente elegidas para llevar a los panteones el Día de Muertos. En países de Oriente son símbolo de larga vida y felicidad.

En el verano sembraron girasoles, que fueron todo un éxito. De hecho, entre el cempasúchil hay un sendero de esta planta, cuya cosecha se espera para noviembre.

“Aquí no hay día de descanso, aquí todos los días hay trabajo, el campo así es”, agrega Dora Elia. “Cuando ya se aproxima esta temporada cortamos toda la noche para ir al amanecer a repartir la flor, o sea los pedidos, a diferentes puntos”.

Las flores ya están en su punto máximo para disfrutar de un bello paseo y, por si toda esta belleza no fuera suficiente, comienza la llegada de las mariposas monarca.

Calculan que la vida de las flores es hasta el 20 de noviembre. El costo de la entrada al campo es de 30 pesos.

"Se pasean, se toman la foto, traen su lonche, aquí comen, platican, visitan todo el campo", invita ella.

¿CÓMO SE LLEGA A LOS CAMPOS DE CEMPASÚCHIL?

Para llegar hay que tomar la carretera libre Monterrey-Saltillo.

A la altura del kilómetro 41.5 se gira a la derecha para entrar a la comunidad, se avanza cerca de un kilómetro y, a la izquierda, estará el ‘Campo de Flores Don Mateo’. Son unos 40 minutos desde Monterrey.

Con información de Reforma

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