EFE
RÍO DE JANEIRO, Brasil.- El Gobierno brasileño autorizó el viernes el envío a Río de Janeiro de tropas de la Fuerza Nacional de Seguridad, un cuerpo de elite de la Policía, para que refuercen la seguridad durante la visita que el papa Francisco hará a Brasil en julio próximo para participar en la Jornada Mundial de la Juventud.

La autorización fue incluida en un decreto publicado ayer en el Diario Oficial de la Unión y en la que también se determina el envío de los agentes de esa fuerza policial a las ciudades en que se disputará la Copa Confederaciones de la FIFA.

El decreto del Ministerio de Justicia prevé que miembros de la Fuerza Nacional de Seguridad se sumen a las tropas del Ejército y a los agentes de la Policía ya destacados para garantizar la seguridad durante la visita del pontífice, que permanecerá en Brasil entre el 22 y el 28 de julio.

Igualmente autoriza el envío de agentes de este grupo de elite a Río de Janeiro, Brasilia, Salvador, Recife, Belo Horizonte y Fortaleza, las ciudades que serán sede de la Copa Confederaciones entre el 15 y el 30 de este mes.

El Ministerio de Justicia justificó el envío de los refuerzos policiales en respuesta a una petición realizada por la Secretaría Extraordinaria de Seguridad para los Grande Eventos, un organismo creado por el Gobierno para coordinar las acciones militares y policiales durante eventos como el Mundial de fútbol del próximo año y los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro en 2016.

El número de agentes federales a ser enviados para cada ciudad dependerá de lo que determine la Secretaría Extraordinaria.

La Fuerza Nacional de Seguridad, vinculada al Ministerio de Justicia, es un grupo de policías de elite de todo el país entrenado para realizar operaciones especiales en ciudades con brotes de violencia o en regiones de conflicto, o para reforzar la seguridad en estados que lo soliciten.