EU y China lideran reunión crucial en Viena sobre el fentanilo
Para Alejandro Mayorkas y Wang Xiaohong es vital ponerle fin a la peor crisis de drogas en Estados Unidos.
Alejandro Mayorkas, secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos y Wang Xiaohong, ministro de Seguridad Pública de China, llevaron a cabo una crucial reunión ayer en Viena, Austria.
El objetivo central de este encuentro fue impulsar la colaboración entre ambos gobiernos en la batalla contra el fentanilo, un opiáceo que está dejando graves consecuencias en la población estadounidense y que se ha convertido en la peor crisis de drogas en la historia de Estados Unidos.
"Las dos partes mantuvieron un debate sincero y constructivo sobre las medidas necesarias para combatir la propagación de precursores químicos y las organizaciones criminales transnacionales que se lucran con la producción, distribución y venta de drogas sintéticas ilícitas. También asumieron compromisos con respecto a la cooperación continua en materia de aplicación de ley, intercambios técnicos bilaterales entre expertos, clasificación de precursores y promoción de la cooperación", señala un comunicado de la oficina de Mayorkas.
Esta reunión -que contó con altos cargos del Departamento de Estado, Justicia, Tesoro y las oficinas antidrogas y migratorias- se basa en los compromisos asumidos entre el presidente estadounidense, Joe Biden, y el chino, Xi Jinping, en noviembre de 2023, así como los recientes encuentros entre ambas partes, que incluyeron una reunión inaugural a finales de enero del grupo de trabajo antinarcóticos.
Mayorkas y Wang también conversaron sobre la ampliación de su cooperación policial en la lucha para proteger a los niños de la explotación y el abuso sexual infantil a través de internet.
"Este crimen atroz tiene alcance global y los depredadores no trazan fronteras geográficas que limiten el alcance de esta crueldad", han manifestado.
El portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, Matthew Miller, anunció a finales de enero que Washington y Pekín habían comenzado a colaborar en la lucha contra el tráfico de fentanilo cuando el subsecretario de Asuntos Internacionales en materia de Estupefacientes, Todd Robinson, viajó a Pekín junto a una delegación interinstitucional para marcar el inicio de un grupo de trabajo bilateral sobre lucha contra los estupefacientes con China.
"La puesta en marcha de este grupo de trabajo supone un paso importante para avanzar en acciones concretas de aplicación de la ley y coordinar medidas específicas para detener el flujo ilícito de precursores químicos que están alimentando la crisis", declaró entonces, antes de destacar "los primeros pasos dados" por el gobierno chino para restringir el suministro de sustancias precursoras del fentanilo en materia legal y policial contra decenas de proveedores de drogas sintéticas.
Miller celebró entonces estas medidas que, consideró, eran una forma de reanudar la cooperación chino-estadounidense en esta materia, que había estado suspendida durante años por las recientes tensiones entre ambos países.
Con información de Reforma