Manila.- En Filipinas quien viole la cuarentena podría perder la vida a manos de la policía, debido a que el presidente, Rodrigo Duterte, ha instruido dispararle a las personas que causen problemas; igualmente advirtió que no tolerará las agresiones hacia el personal médico de la nación.

En un discurso televisado, el mandatario dijo que es vital que toda la población siga las medidas de cuarentena domiciliaria, puesto que las autoridades tratan de frenar los contagios y evitar que el frágil sistema sanitario del país se vea desbordado.

En Filipinas se han registrado 96 muertes por coronavirus y 2 mil 311 casos confirmados.

"Está empeorando, así que una vez más les reitero la seriedad del problema y su deber de escuchar", dijo Duterte la noche del miércoles.

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"Mis órdenes a la policía y al ejército (...) son que si hay problemas y se produce una situación en la que alguien se defiende y pone sus vidas en peligro, disparen a matar".

"¿Entendido? Muertos. En lugar de causar problemas, los voy a enterrar".

Sus declaraciones ocurren luego de una protesta realizada en Manila por la falta de ayuda alimentaria del gobierno.

También se dan en el contexto de la indignación generalizada por agresiones y discriminación contra el personal médico del país, por el temor a que porten el virus.

El presidente obtuvo la semana pasada "poderes especiales" del Congreso para lidiar con la pandemia en una ley que incluye la provisión de 4 mil millones de dólares para repartir entre 18 millones de hogares desfavorecidos del país, donde el 16 % de la población vive bajo el umbral de la pobreza.

Sin embargo, la ayuda está bloqueada porque el Gobierno todavía elabora "una base de datos consolidada" de los beneficiarios.

(Con información de La Nación)