Fiscal pide desestimar cargos penales contra Trump
La medida se basa en que mandatario en funciones no puede ser procesado, según el Departamento de Justicia.
Fiscales federales anunciaron este lunes que solicitaron desestimar los cargos penales contra Donald Trump relacionados con la interferencia en las elecciones de Estados Unidos de 2020 y la retención de documentos confidenciales. Este giro se basa en una política del Departamento de Justicia que prohíbe procesar a un mandatario en funciones.
La medida, encabezada por el fiscal especial Jack Smith, marca el fin de las investigaciones federales contra Trump tras su reciente victoria electoral, la cual lo llevó de regreso a la Casa Blanca a pesar de las causas penales en su contra relacionadas con los comicios y varios otros cargos.
Los casos, considerados como los más graves entre las amenazas legales contra el expresidente, quedan archivados, asegurando que asuma el cargo sin enfrentar juicios penales. Smith aclaró que esta decisión no se basa en la solidez de las acusaciones, sino en el cumplimiento de la política vigente.
"Dicha restricción es categórica y no depende de la gravedad de los delitos", afirmaron los fiscales en documentos judiciales.
El Departamento de Justicia cree que Trump ya no puede ser procesado de acuerdo con la política de larga data que establece que los presidentes en funciones no pueden ser procesados.
Los casos incluyeron la presunta manipulación electoral y el manejo de documentos clasificados, que Trump defendió como persecuciones políticas durante su campaña.
El caso de interferencia electoral, presentado en 2022, fue visto como una amenaza significativa para Trump mientras competía por la Casa Blanca. Sin embargo, disputas legales sobre la inmunidad presidencial y fallos de la Corte Suprema retrasaron su avance. En julio, el tribunal confirmó que los expresidentes tienen amplia inmunidad en ciertos casos, lo que debilitó la posición de los fiscales.
Aunque la decisión era predecible tras la victoria de Trump, deja un vacío en la rendición de cuentas sobre los intentos por revertir los resultados de 2020.
La Corte Suprema dictaminó por primera vez en julio pasado que los expresidentes gozan de una amplia inmunidad a ser procesados, y envió el caso de regreso a la jueza federal Tanya Chutkan para determinar cuáles de las acusaciones, de ser el caso, podrían proceder a juicio.
(Con información de Proceso)