El 14 de enero marcará un momento muy significativo en la monarquía danesa, ya que la reina Margarita tomará la decisión de abdicar después de un reinado de 52 años. 

Su hijo, el príncipe Federico, se prepara para asumir el papel de rey de Dinamarca en una ceremonia que será testigo de la participación de numerosas personalidades.

Sin embargo, entre aquellos que no se sumarán a la festividad se encuentra la princesa Marie Cavallier, esposa del príncipe Joaquín, hijo menor de Margarita. 

La ausencia de la princesa de 47 años resalta las tensiones de la familia real danesa que se intensificaron en otoño de 2022, cuando la reina Margarita revocó los títulos de sus hijos, el conde Henrik y la condesa Atenea de Monpezat.

Por dicha decisión, Marie y Joaquín decidieron abandonar Dinamarca e instalarse en Estados Unidos en septiembre de 2023, donde han comenzado una nueva vida lejos de las obligaciones 'reales' y donde el hermano de Federico trabaja como agregado del Ministerio de Defensa.

Ahora, evidenciando que no se habrían limado asperezas, Marie decidió que se quedará en Washington y no viajará a Copenhague para asistir al acto de abdicación de su suegra y a la coronación de su cuñado, por lo que su esposo, el príncipe Joaquín tendrá que hacerse presente en solitario.

Así lo anunció la jefa de prensa real, Lene Balleby, justificando dicha ausencia a que "los niños van a la escuela y no hay ninguna razón especial" a pesar de lo histórico de la jornada en la que la reina Margarita cederá el trono al príncipe heredero, Federico.

Además, la portavoz de palacio reveló que el príncipe Joaquín no desempeñará ninguna función oficial ese día trascendental para su país y estará presente tan solo a título familiar y, tras asistir al Parlamento de Dinamarca, volverá a Estados Unidos con su mujer y sus hijos el día 15.

Con información de Reforma