Caída de Bashar al-Assad revela horrores en prisión de Sednaya
La liberación de presos en Siria destapa atrocidades en el régimen, con historias impactantes de tortura y desapariciones.
La caída del dictador sirio Bashar al-Assad marcó el fin de décadas de represión y el inicio de la liberación de miles de presos de las temidas cárceles del régimen. Entre ellas, la prisión de Sednaya, conocida como “el matadero humano”, dejó al descubierto historias de horror que han estremecido al mundo.
Grupos rebeldes tomaron Damasco y liberaron prisioneros políticos, mujeres y niños de los centros de detención.
En Sednaya, videos muestran cómo detenidos salían frágiles y demacrados a la luz del sol, mientras familiares lloraban al descubrir que estaban vivos. Algunos presos, incapaces de hablar por años de tortura, enfrentaron la libertad con incredulidad.
SIRIA. Decenas de jóvenes abandonan la prisión de SEDNAYA en estado de shock cuando el hombre que les pide que se vayan y regresen a sus casas.
— Liliana Franco (@lilianaf523) December 9, 2024
La mujer tenía miedo y dijo que el régimen de Assad sabría que habían escapado y los traería de vuelta.
Les dice que Assad ha caído.… pic.twitter.com/1sNf08WwlR
La Defensa Civil Siria, conocidos como los cascos blancos, encontró celdas subterráneas ocultas. En 2022, un informe de la Asociación de Presos y Desaparecidos en Sednaya (ADMSP) reveló las "celdas de sal", usadas para preservar cadáveres debido a la falta de morgues. Según testimonios, prisioneros como Abdo tropezaban con cuerpos deshidratados al ser encerrados en estas celdas.
Amnistía Internacional estima que entre 2011 y 2016, hasta 13 mil personas fueron ejecutadas en Sednaya. Mujeres con niños gritaban mientras los rebeldes rompían candados para liberarlas. “No tengan miedo... ¡Bashar Assad ha caído!”, exclamaban los combatientes.
Han llegado los perros de rescate al centro de torturas de Sednaya para intentar encontrar la puerta o los ingresos a las celdas que están bajo tierra. Los prisioneros de Bashar al-Assad todavía están vivos, pero cada hora que pasa es crucial. pic.twitter.com/Eb9hadU5pW
— Agustín Antonetti (@agusantonetti) December 9, 2024
Familias de detenidos se congregaron en las cárceles con la esperanza de reencontrarse con sus seres queridos. Bassam Masri, cuyo hijo lleva 13 años desaparecido, expresó: “Esta felicidad no se completará hasta que pueda ver a mi hijo fuera de la prisión”.
La liberación de estas prisiones no solo destapó los horrores del régimen de Al-Assad, sino que marcó el inicio de una esperanza renovada para miles de familias sirias.
(Con información MSN)