El Papa Francisco no esconde su afición por el futbol, incluso él mismo ha presumido ser hincha de San Lorenzo. Y ahora el pontífice tomó unos minutos para una de sus pasiones deportivas más conocidas, y es que jugó futbolito al terminar la Audiencia General en el Vaticano este miércoles.

El Papa recibió la mesa como regalo por parte de la asociación italiana Sport Toscana Calciobalilla, que se dedica a apoyar a personas con discapacidad y vincularlas con el deporte y que ha diseñado estos futbolitos para la inclusión. Fue entregada por Natale Tonini, presidente de dicha agrupación.

En las imágenes se observa al Papa Francisco sonriendo, mientras defiende el equipo rojo, esto a un costado del Aula Pablo VI, donde sostuvo su Audiencia con los fieles.

La mesa contenía escritas palabras como amistad, inclusión, lealtad, compromiso, dignidad, respeto, generosidad, amor, honestidad, esperanza, altruismo, entre otros detalles. Refirieron que buscarán que las iglesias donde se reúnan jóvenes tengan este espacio de recreo especialmente diseñado para todos.

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