Agencias
WASHINGTON, D.C.- La Patrulla Fronteriza anunció este miércoles que modificará el protocolo para el uso de fuerza de sus agentes, en respuesta a casi un centenar de recomendaciones por denuncias de abusos contra migrantes indocumentados en la frontera con México.

Los cambios fueron anunciados menos de una semana después que un reporte interno criticó a la Oficina de Aduanas y Migración (CBP) debido a la imposibilidad de conocer los alcances de estos casos como consecuencia de su actual sistema administrativo.

La Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Interna (DHS) se declaró incapaz "para determinar el número total de alegatos de uso excesivo de la fuerza, así como las investigaciones (al respecto)" que involucraron a agentes de CBP.

Explicó que esta situación se debe a que en el sistema administrativo para clasificar estos casos no existe un apartado designado especialmente para aquellos que involucren uso excesivo de la fuerza, de acuerdo con Notimex.

Destacó que de los 136 posibles incidentes que involucraron el uso de armas de fuego a manos de agentes del CBP entre los años fiscales 2009 y 2012, no fue posible determinar si ello ocurrió en 39 de los casos, en tanto que en otros 22 se descartó por completo.

El reporte fue preparado en respuesta al aumento de casos de uso excesivo de la fuerza por parte de agentes, así como a una carta de 16 legisladores que solicitaron al DHS una revisión de estas denuncias.

En un comunicado difundido este miércoles, CBP dijo estar de acuerdo con las más de 90 recomendaciones presentadas como resultado de la revisión de estas directrices ordenadas en octubre de 2012.

Mejor análisis

Las recomendaciones incluyen "mejoras en la capacitación en el uso de la fuerza y tácticas, herramientas adicionales para un mejor análisis de incidentes y tendencias que informen mejor la toma de decisiones y una amplia gama de opciones de equipo", señaló.

La dependencia indicó que aún antes de la difusión del reporte, la Oficina del Inspector General del DHS había ya empezado a realizar cambios a partir de la adopción de cuatro iniciativas.

Dichas iniciativas están enfocadas en mejorar la capacitación de los agentes con el objetivo de evitar el uso de fuerza y ampliar la revisión sobre el uso de tácticas y equipo.

Entre las acciones que CBP considera implementar a futuro se incluyen un programa piloto para instalar cámaras de video en los vehículos, así como otras de tamaño pequeño que podrían ser llevadas por los agentes en la solapa de sus uniformes.