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MÉRIDA, Yuc.- La Secretaría de Salud recomendó a la población no recoger animales de la calle, para evitar el riesgo de contagio ante el brote de rabia que asuela al Estado.

El consejo de la dependencia surgió tras detectarse un caso de la enfermedad, en una camada de gatos que un ciudadano rescató fuera de Mérida (en carretera de Muna), y que, al traerlos, tuvieron contacto con varias personas.

“Hacer contacto con ellos o recogerlos pudiera verse como un acto de caridad, sin embargo, la realidad es que es un potencial riesgo de contagio o transmisión de enfermedades”, declaró Eduardo Mendoza Mézquita, secretario de Salud. Lee el comunicado oficial aquí.

En total, la Secretaría de Salud atendió a 11 personas que tuvieron contacto con uno de los animales que ya presentaba el virus; sin embargo, ya había tenido que atender a otras que tuvieron contacto con otros animales rabiosos.

De hecho, el de los gatos es el tercer reporte en menos de dos semanas en Yucatán; antes se habían presentado dos casos en perros. El 9 de abril, se supo de un caso en un pitbull, cuyo dueño presentó una herida en el hombro, y por eso recibió trtamiento.

Antes, el 4 de abril, hubo un caso positivo del virus en un perro del municipio de Hoctún, y cuatro personas fueron atendidas por haber tenido contacto con el animal.

Síntomas de la rabia en seres humanos

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la rabia es una enfermedad viral que se contagia de animales a hombre a través de mordeduras y arañazos.

Aquí los síntomas:

• El periodo de incubación de la rabia suele ser de 1 a 3 meses, pero puede oscilar entre una semana y un año.
• Fiebre acompañada de dolor o parestesias (cosquilleo, calor o frío) en el lugar de la herida.
• Cuando el virus avanza, se produce una inflamación progresiva del cerebro y la médula espinal que acaba produciendo la muerte.

La enfermedad puede adoptar dos formas:

• Rabia furiosa: enfermos presentan signos de hiperactividad, excitación, hidrofobia (miedo al agua) y, a veces, aerofobia (miedo a las corrientes de aire o al aire libre), y la muerte se produce a los pocos días por paro cardiorrespiratorio.
• Rabia paralítica: tiene una evolución menos grave y, por lo general, más prolongada. Los músculos se van paralizando gradualmente, empezando por los más cercanos a la mordedura o el arañazo. El paciente va entrando en coma lentamente y acaba falleciendo. A menudo, la forma paralítica no se diagnostica correctamente, lo cual contribuye a la subnotificación de la enfermedad.