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MÉRIDA, Yuc.- Desde las primeras horas de este viernes inició el desmantelamiento de la embotelladora Sidra Pino, donde se elaboraba el "Soldado de Chocolate", la bebida icónica de Yucatán.

Exobreros de la fábrica que aceptaron el jueves ser finiquitados con siete millones de pesos para 117 trabajadores, apoyaron en la movilización de unas 15 camionetas y la limpieza del inmueble.

Al lugar llegaron agentes de la policía estatal para brindar seguridad mientras se realizaban estas labores en la embotelladora ubicada en la calle 72 con 63, que luce deteriorada tras casi cinco años en abandono.

El jueves, el representante de los trabajadores sindicalizados de Sidra Pino, Pedro Noh González, dijo que la directiva nacional de su sindicato les informó sobre el acuerdo de una compensación económica y con ello el retiro de las banderas rojinegras, poniendo fin a una de las huelgas más largas de los últimos años en la entidad.

El problema inició en octubre de 2010, cuando el entonces propietario Víctor Erosa Lizarraga desapareció dejando a la deriva a los empleados, a quienes les había reducido sus sueldos hasta en un 50 por ciento, por supuestos problemas financieros.

Los obreros siguieron acudiendo a la fábrica a pesar de que ya no funcionaba, y en enero de 2011 finalmente estalló la huelga.

Autoridades federales dieron la razón a los trabajadores y ordenaron el embargo y la subasta de los bienes muebles e inmuebles, pero éstos ya no estaban a nombre de Erosa Lizarraga.

En marzo pasado, mediante su sindical nacional, los obreros interpusieron una denuncia ante la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra del empresario y después hicieron lo propio ante la Procuraduría General de la República (PGR).

Los afectados aceptaron firmar para concluir la huelga y desistirse de estas denuncias a cambio de siete millones de pesos que les fueron entregados en efectivo en ese mismo instante. El inmueble y la marca quedan en poder de nuevos propietarios para que hagan lo que mejor les convenga.

El pasado 16 de julio, en el arranque del proyecto "Vía Montejo" en Mérida, Víctor Erosa Lizarraga, exdueño de la Siderúrgica de Yucatán y la embotelladora Sidra Pino, adelantó a los reporteros que un grupo de inversionistas locales y nacionales buscaba rescatar la empresa que elaboraba el Soldado de Chocolate y la Sidra Pino en Yucatán.

“Esas marcas todavía tienen mucho arraigo en Mérida y Yucatán, por lo que un grupo de inversionistas locales y nacionales están explorando la posibilidad de rescatar esa refresquera”, dijo en esa ocasión.

El "Soldado" pierde la "guerra"

La Embotelladora de Refrescos Pino, S.A. de C.V. producía, además del Soldado de Chocolate, la Sidra Pino Negra, refrescos que conquistaron el paladar de varias generaciones de yucatecos e incluso de visitantes.

Varias ciudades mexicanas tienen un refresco que los identifica: Por ejemplo, en Acapulco, la Yoly; en Veracruz, el Jarochito o la Zaraza; en Mazatlán, el Tónicol. 

En los años 70 se embotellaba en el penal federal de Islas Marías, Nayarit, un refresco de sabores: "Tres Marías".

En octubre de 2012, empresarios retomaron la fama del Soldado de Chocolate para lanzar al mercado el Boxito de chocolate, con el que pretendieron reconquistar parte del mercado de la hoy ex Sidra Pino.