MÉRIDA, Yucatán.- Un grupo de vecinos de la colonia San José Tecoh solicita a las autoridades el relleno del parque hundido, ya que desde hace más de un año se llenó de agua y ésta permanece estancada; en ese lugar un joven perdió la vida en noviembre pasado, por lo que manifiestan que el lugar representa un serio peligro para los niños y jóvenes del rumbo. 

Cabe recordar que los fenómenos meteorológicos “Cristóbal”, “Gamma”, “Delta” y “Zeta”, que azotaron la entidad el año pasado, generaron que éste y los demás parques hundidos de la ciudad aumentaran su nivel debido al incremento del manto freático. 

Teresita de Jesús Chan Pacheco, vecina del rumbo, dijo que los vecinos quieren que este sitio se rellene, se lo han solicitado a la autoridad municipal, a varios políticos pero hasta el momento no les han dado una respuesta; agregó que desde el año pasado se llenó de agua el parque y cada lluvia que cae sube más el nivel. 

“Todos vienen, ven como está el parque pero de ahí no pasa, hasta un joven se ahogó y sus hermanos también pasaron a perder la vida en este sitio y ni así nos hacen caso; existe un verdadero peligro porque en este parque se realiza un tianguistodos los lunes y miércoles, muchas personas no pueden dejar a sus hijos en sus casas y los tren con ellos, por lo que estos días se congregan muchos niños y hay que estarlos vigilando”, indicó.

María Nah Ku, precisó que con esta reunión donde convocaron a los medios de comunicación buscan que ahora sus demandas sean escuchadas, no desean que ocurra una tragedia como la del año pasado o la ocurrida el domingo pasado en Umán, aunque fue en diferentes circunstancias pero no deja de ser una tragedia.

“Pedimos que se rellene, pero si  no se puede aunque sea que le pongan un alambrado para delimitar toda el área peligrosa y dejar solamente una rejita para cualquier cosa, pero que alguien cuide, pedimos que los guardaparques se queden más tiempo en este sitio para cuidar y vigilar que no suceda una desgracia”, aseguró.

Por su parte Gregoria May Dzul explicó que este sitio es un verdadero criadero de moscos y no quieren que vuelva a pasar una desgracia para que sean escuchados y se tomen cartas en el asunto, antes de que se estancará tanta agua acudían muchas familias a este sitio, pero ahora son pocos los que llegan.

“No vienen porque tienen miedo de que les pase algo, se resbalen, se caigan en los enormes charcos y puedan perder la vida ellos o algún familiar. Las personas mayores conocen el peligro de este lugar y por ello optan por no venir, pero los niños no saben del peligro y vienen a jugar lo que es sumamente peligroso”, expuso.

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