Airbnb promueve tours ilegales en la Laguna de Bacalar
Operadores afirman que Capitanía de Puerto y el ayuntamiento no hacen nada para detener las lanchas piratas.
El número de embarcaciones irregulares o ‘piratas’ que ofrece el servicio de paseos turísticos se ha triplicado en el último año en la Laguna de Bacalar, gracias a la plataforma de alojamiento Airbnb.
De acuerdo con integrantes de la Asociación de Prestadores de Servicios Náuticos local, quienes ofrecen hospedaje a través de Airbnb ahora incluyen recorridos en sus veleros o lanchas en la laguna, como servicio “adicional”.
Aunque no se tiene un número exacto del número de lanchas irregulares que operan diariamente en Bacalar, pero la Asociación de Prestadores de Servicios Náuticos calcula que pasaron de ser 40 a más de 120 en el último año.
“Esta situación nos afecta a nosotros como lancheros organizados, ya que pagamos permisos que ellos no. Además, como no están regularizados, nadie los obliga a respetar los lineamientos ambientales, por lo que estos barcos “piratas” se adentran en zonas prohibidas o contaminan el agua con total impunidad”, afirmó Carlos Guillén Álvarez, quien desde hace 10 años ofrece el servicio de paseo en velero en la llamada “Laguna de los Siete Colores”.
Aunque han solicitado en varias ocasiones a la Capitanía de Puerto y al Ayuntamiento a que intervenga en esta situación, hasta ahora las autoridades no han hecho nada al respecto.
“El problema es que ni siquiera están dados de alta como prestadores de servicio, y mucho menos ofrecen el paseo como parte de un tour: las embarcaciones les pertenecen a los dueños de las grandes casas que se encuentran a la orilla de la Laguna y que se ofertan a través de Airbnb, así que cuando los detiene alguna autoridad, simplemente mencionan que se trata de un paseo particular de los usuarios hospedados”, denuncia don Carlos.
Esta “laguna legal” ha permitido su incremento desmedido, dicen los lancheros organizados; por lo que sólo es cuestión de tiempo para que surjan accidentes fatales, pues la mayoría de estas embarcaciones incumplen con las medidas básicas de seguridad como utilizar chalecos salvavidas o mantenerse en óptimas condiciones para transportar a un gran número de personas.
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