Antonio Anaya/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Cuando usted supone que va a disfrutar del sueño de su vida al recibir su automóvil recién salido de la agencia o del taller, puede llevarse una desagradable sorpresa como le ha sucedido a decenas de consumidores. De acuerdo con José Gamaliel Canto Cambranis, encargado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) en la zona norte del estado, se han atendido 31 quejas en lo que va del 2014.

En 2013, el número de casos ascendió a 132, de los cuales el 60% se debió a fallas mecánicas o deficiencias en el cielo raso. En la mayoría de los casos, los prestadores de servicios se negaron a cumplir la garantía lo que motivó las quejas ante la dependencia.

Durante 2013, a menudo, las reparaciones no se hicieron de manera eficiente, el servicio de mantenimiento no fue adecuado o la reparación resultó defectuosa, en al menos 60 de 80 casos atendidos por la Profeco.

Al menos diez quejas fueron recibidas en relación a vehículos nuevos, de los cuales, los dueños exigían la reparación del defecto, la reposición del auto o la devolución de su dinero.

Afortunadamente, se ha logrado una resolución favorable a los consumidores en 80% de los casos; para alcanzar este resultado se ha conciliado entre las agencias, los fabricantes y los talleres, con la finalidad de resarcir al usuario por las fallas de los carros.

Del universo de quejas atendidas, únicamente en un caso se fue a Procedimiento por Infracciones a la Ley (PIL) donde las multas pueden alcanzar cifras de medio millón de pesos, pues se trata de garantizar el pago total de los vehículos.

Sólo en 2013, se logró recuperar un monto reclamado por cuatro millones 807 mil pesos, en tanto que en lo que va de 2014 la suma recobrada asciende a 746 mil pesos, según las cifras proporcionadas por Canto Cambranis.

Hay casos en que las personas no exigen al prestador de servicios un recibo por el dinero que pagan y ese caso no es posible realizar el reclamo a través de la Profeco, sino mediante demanda judicial.

Recomendaciones 

Para evitar abusos y falta cumplimiento de las agencias o los talleres,  el encargado estatal de la Profeco emitió cinco recomendaciones: primero, verificar que la empresa tenga contrato de adhesión unilateral con la dependencia.

Segundo, solicitar la cotización previa por la falla que se haya diagnosticado. Esto le da formalidad al trato y deberá establecer las reparaciones que se van a realizar y el costo del servicio junto con las piezas que se van a cambiar.

Tercero, exigir una nota, recibo o factura para poder comprobar la transacción tener herramientas jurídicas que permitan la defensa de los derechos del consumidor.

Cuarto, ante cualquier acto donde el consumidor sienta afectado sus derechos, acuda de inmediato ante la procuraduría, donde se le canalizará con el Departamento de Verificación y Vigilancia para atender su queja, además de representar una defensa de sus intereses, servirá para proteger a otras personas contra prácticas abusivas.

Quinto, toda reparación o cargo fuera de los presupuestado debe ser previa autorización del consumidor y en caso no estar satisfecho con el servicio o el precio, no firmar de recibido o de conformidad.