Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Una mala intervención del cuerpo Bomberos durante un incendio, ya sea en zona urbana o rural, podría costar vidas. Esta semana, los 43 elementos, entre bomberos y personal de la unidad de Respuesta a Emergencias Médicas (Urem), así como los 10 aspirantes a ingresar a la corporación, realizaron diversos entrenamientos de búsqueda, rescate y prácticas de evacuación de personas atrapadas en un siniestro.

De acuerdo con el director, Reynaldo Vargas Canché, lo más importante en un incendio es evacuar a las víctimas y para eso no se necesita agua, sino entrar al lugar en llamas y extraer a las víctimas

“Muchos opinan que cuando una casa se está quemando, lo más importante es echar agua, con esta práctica demostramos que es una idea equivocada. En el momento que se echa agua a la vivienda con víctimas en el interior, se contamina la atmosfera, se eleva la temperatura y se desplaza el poco oxigeno que hay en el ambiente, lo que puede causar la muerte”, expuso.

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Precisó que lo más importante al momento de recibir un  reporte de incendio donde hay personas atrapadas, es que la unidad especial de búsqueda y rescate intervenga para realizar una extracción, búsqueda y evacuación de una víctima.

El curso duró una semana y culminó la noche del viernes con una práctica en las instalaciones del antiguo edificio de Migración, en la calle Tecnológico de Villahermosa con Insurgentes.   

“Estas técnicas son procedimientos del Departamento de Bomberos de Nueva York,  de las cuales se ha tomado capacitación para estandarizar un plan de procedimientos, para saber actuar en caso de un siniestro y de manera profesional con los recursos y tecnologías con la que se cuentan”, indicó.

El cuerpo de bomberos aumentó las estaciones, vehículos de rescate, unidades contraincendios; ahora tiene tres carrobombas; tres, unidades cisterna; cinco, ambulancias; dos, unidades de rescate y cuatro, unidades de intervención rápida.