El exceso de ruido acaba con tu audición y aumenta el estrés

Al día las autoridades municipales reciben entre dos y tres quejas por ruidos elevados.

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El ruido en exceso afecta la audición, el sueño e incrementa los niveles de estrés. (Luis Soto/SIPSE)
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Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La contaminación acústica ocasiona efectos fisiológicos y psicológicos nocivos para la salud al interferir en la actividad habitual y el descanso. 

De acuerdo con especialistas en otorrinolaringología, es un problema cada vez más frecuente, sobre todo en las grandes ciudades por el desarrollo industrial, transporte, construcción, actividades lúdicas o recreativas. 

Los síntomas más visibles son la pesadez en los oídos o taponamiento, zumbidos, se escuchan los ruidos amortiguados y sobretodo no se logran escuchar los timbres altos cuando hay mucho ruido de fondo en un lugar. 

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Con base en la NOM-081-SEMARNAT-1994, se establecen los límites máximos permitidos de emisión de ruido, sin embargo, ni discotecas, centros nocturnos, iglesias lo respetan, pues la población está expuesta a más de 65 decibeles cuando el límite máximo permitido en zona residencial es de 55 y en zonas comerciales 65. 

De acuerdo con autoridades municipales, llegan al día dos a tres quejas por contaminación de ruido, sobre todo de talleres de carpintería, gimnasios, templos, discotecas, bares, talleres de hojalatería, tortillerías entre otros.

“Nunca pensé que un centro de oración me dejaría casi al borde de la locura”, expresó María Solares de 38 años, pues desde que dicho templo de una secta religiosa se instaló a unos lotes de su hogar, mantiene crisis nerviosas e incluso le imposibilita comunicarse al interior de su casa.

“Nos tenemos que salir desde que inician su ritual, se oyen gritos, lamentos, la música y la voz del pastor ensordece"

“Nos tenemos que salir desde que inician su ritual, se oyen gritos, lamentos, la música y la voz del pastor ensordece, mi casa vibra por el alto volumen que ponen y las quejas vecinales, las denuncias hechas de nada han servido, pues una semana reducen el ruido y después se les olvida y empiezan a subirle al tono”, dijo molesta.

Efectos nocivos

De acuerdo con Rubén Maldonado Villanueva, director del Hospital General “Jesús Kumate Rodríguez”, el ruido, afecta la audición, el sueño, aumenta el estrés, disminuye la concentración y con ello; llegan enfermedades auditivas, principalmente en oído interno, enfermedades de tipo nervioso y problemas cardiovasculares. 

Comentó que la pérdida de la audición es muy raro que sea dolorosa entonces la gente no lo percibe.

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