Gonzalo Zapata/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Ni la lluvia ni la noche detienen la fiesta, incluso cada vez son más los visitantes que todos los días disfrutan de la música en vivo y del “buen ambiente” que cientos de jóvenes derrochan en la presente temporada de Spring Break.

Ante ello, la temporada se extendió hasta el 15 de abril, 10 días más que lo programado por el equipo de entretenimiento del hotel Oasis.

“Sí este año hubo jóvenes de más nacionalidades, los de Estados Unidos y los de Canadá fueron los que predominaron, pero también se recibieron turistas de Grecia, Austria, Ucrania, Suecia y los conocidos de América Latina como son de Brasil y Argentina”, precisó Gabriela Córdova Tornell, gerente de entretenimiento de la temporada 2015 del Spring Break.

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Comentó que en total fueron siete conciertos los que se organizaron por el Oasis para los jóvenes, de los que destacaron Joe Ghost, el 21 de febrero, y Dyro, el 18 de marzo pasado. 

“Fueron entre 15 y 20 dj´s patrocinados y residentes los que han animado el ambiente en el hotel”, destacó.

La actual temporada del Spring Break, para el hotel Oasis, comenzó el pasado 14 de febrero y se tenía previsto cerrar el 5 de abril.

De acuerdo con la dirección de Turismo de Benito Juárez, para el período 2015 de dicho segmento de turismo se espera el arribo de más de 60 mil visitantes, incluso la dependencia entrega folletos para tener una “temporada limpia”.

Jorge Fernández, estudiante de la Universidad de Rosario, en Argentina, es uno de los cientos que disfrutan de una semana completa en el destino. “La fiesta no para, somos cinco amigos que decidimos ser parte del ambiente, hemos dormido bien poco porque si no es en la alberca, es en la disco o en los cuartos la fiesta”, comentó,

Él junto a sus compañeros, viajará de regreso a su país este domingo, por lo que pretenden regresar el próximo año, cuando cursen el último año de su licenciatura.

De acuerdo con personal del Oasis, el hotel cuenta con mil 544 habitaciones, de las cuales la mitad fueron destinadas para hospedar a los springbreakers, la otra mitad para otro segmento de turismo.

Para mantener un control de los jóvenes y sus fiestas, el establecimiento reforzó a su personal de seguridad con 70 elementos, los cuales en su mayoría fueron destinados para la zona de albercas y playas.

Gabriela N, elemento de seguridad del hotel, comentó que el ambiente en ocasiones se ha salido de control, ha habido riñas, han levando de la playa, la alberca y del campo de golf a los estudiantes en estado de ebriedad.

“Y eso que este año ha estado más calmado que los anteriores”, indicó la empleada de seguridad del centro de hospedaje.