Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Las 286 familias que habitan en la comunidad de San Isidro la Laguna, conocida como ex campamento de refugiados guatemaltecos, ya no sufrirán desabasto de agua potable, que por espacio de varios años constituyó una de las demandas más sentidas de la población, pues ya cuentan con equipo de bombeo nuevo, que permitirá brindar el servicio en mayor cantidad y con mayor presión.

De acuerdo con los habitantes, durante varios años venían han padecido la falta de suministro, principalmente en épocas de calor, que es cuando se registra mayor demanda en el consumo y la presión bajaba, de modo que gran parte de los pobladores no contaban con el servicio domiciliario y tenían que recorrer varios metros para abastecerse del vital líquido.

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Eduardo Ic Sandy, gerente de la paraestatal en el municipio de Bacalar, informó por varios años, los habitantes utilizaron una bomba de 15 caballos de fuerza, que tenía una capacidad de ocho litros por segundo, que en su momento fue útil para abastecer a toda la comunidad.

Sin embargo, con el crecimiento de la población, el servicio ya no llegaba a determinadas zonas, principalmente las que se encuentran alejadas del cárcamo de bombeo, o en épocas de intenso calor, que es cuando la demanda se duplicaba y por lo mismo, la presión del servicio bajaba considerablemente.

Fue por este motivo que se consiguió una bomba sumergible con 80 caballos de fuerza, con capacidad para surtir de 15 litros por segundo, con con lo que quedó solucionado el problema