Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Rosa permanece más de nueve horas sentada. Trabaja como secretaria enuna empresa de viajes y desde hace un año lleva un tratamiento para disminuir los dolores. Comentó avergonzada que le llegaban punzadas muy fuertes cada vez que se disponía a sentar.

El dolor le subía hasta la cabeza. Un día descubrió sangre en el inodoro después de ir al baño, y fue cuando decidió visitar a su médico. Eran hemorroides.

Factores que inflaman las venas del recto 

 Leticia del Carmen Martínez Aguilar, presidente de la Asociación Mexicana de Médicos Generales y Médicos Familiares en Quintana Roo, explicó que permanecer largas horas de pie o sentado, llevar una dieta alta en grasa y condimentos, y el sedentarismo, son factores de riesgo para que las venas del recto se inflamen.

Este padecimiento se presenta a cualquier edad, sobre todo en adultos y quienes están mucho tiempo de pie o sentados. Cuando el paciente sufre de estreñimiento provoca que al hacer presión las venas del recto aumenten de tamaño y formen las hemorroides, venas dilatadas por la inflamación.

Recomiendan cambiar hábitos alimenticios 

Dijo que el consumo de comidas secas, como harinas, también lo producen, por ello se recomienda cambiar hábitos alimenticios, tomar muchos líquidos, verduras, alimentos con fibra y disminuir las grasas y condimentos, para que el paciente pueda con prevención disminuir el riesgo de llegar al quirófano, ya que además de ser incómoda la operación es dolorosa la recuperación.

Martínez Aguilar comentó que previa valoración se les da medicamentos para tratarlo. El síntoma principal es mucho dolor, el sangrado ocurre cuando las venas están demasiado inflamadas y se rompen al mínimo esfuerzo, cuando es mucho, el tratamiento es cortar la vena y cauterizarla en una cirugía.

Hay quien dice que después de una operación jamás volverá a padecerlo, la doctora lo desmiente, pues sólo se quita la vena dilatada, pero el riesgo que vuelvan a salir sigue si no se cambian los hábitos.