Detectan nueva forma para extorsionar negocios

Los sujetos andan en motocicletas y están disfrazados de prestamistas.

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Los desconocidos visitan los pequeños negocios de diferentes puntos de la ciudad. (Eric Galindo/SIPSE)
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Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Es la nueva forma de extorsión. Los sujetos andan en motocicleta y traen una mariconera colgada, llegan a las microempresas o negocios pequeños y les ofrecen préstamos de dinero, les piden referencias y es ahí cuando los empiezan a extorsionar, narró un testigo.

Son extorsionadores, disfrazados de prestamistas sobre ruedas, las autoridades locales no los han detectado porque aparentemente actúan de manera legal, además de que los dueños de los puestos tienen miedo a represalias si los denuncian.

Estos sujetos tienen su centro de operaciones en todo lo que es la franja de comercios que se localiza en la avenida Los Tules, desde Costa Maya hasta la Chac Mool.

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Todos los días los agiotistas, como les llaman, andan en motociclista, en ocasiones son dos las personas que tripulan la unidad.

Son inconfundibles porque todos llevan una “mariconeracolgada, donde llevan el dinero y no dudan que tengan oculta algún tipo de arma para defenderse si sufren una agresión.

El dueño de un local se salvó de ser víctima de estos sujetos, una mañana cuando uno de ellos llegó a su local y se metió más allá de las mesas, hasta la sala de la vivienda.

El pequeño empresario le reclamó por qué había entrado a la vivienda, sin autorización y la respuesta que le dio fue que estaba viendo si tenía muebles de línea blanca, y fue cuando le ofreció un préstamo.

El testigo le advirtió al prestamista que si volvía a meterse a su casa, no importaba quien fuera, pero lo iba a golpear hasta que aprendiera a respetar la propiedad privada.

Es una banda dedicada a esta actividad, ya que son varios los sujetos que su función es visitar los comercios de la zona, pero saber que también hay extranjeros, al parecer de Venezuela, Cuba y Colombia, por la forma en la que hablan.

A una comerciante le prestaron dinero, les terminó de pagar, pero posteriormente empezaron a extorsionar a sus familiares, de los que les había dado de referencia, les hablaron de que había sido secuestrada y le pedían dinero, al final de cuentas solo quedó en el susto, porque confirmaron que era solo una extorsión.

Este grupo de extorsionadores tiene cerca de dos meses operando la zona y no solo abarca Villas Otoch, también Villas del Mar.

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