Celcar López/SIPSE
CHETUMAL,Q. Roo.- La Iglesia franciscana de Sabán, del municipio de José María Morelos, única en su tipo en Quintana Roo, tiene un estilo arquitectónico que no presenta columnas en la portada, es decir en la fachada principal, pues comúnmente estas columnas son parte de la ornamentación colonial religiosa, además que es una de las más grandes de las iglesias coloniales, dado por el criterio de que Saban tenía un alto número de indígenas, declaró Francisco Zapata de Torres Avilés, historiador de Felipe Carrillo Puerto.

Sabán está localizada al noroeste del estado de Quintana Roo, también es uno de los pueblos más antiguos del estado, como Tihosuco, y, es conocido por ser un lugar clave durante la Guerra de Castas.

Los franciscanos tuvieron un papel importante al fundar ciudades españolas durante el siglo 16, pues cuando Montejo dirige el proceso de conquista en esta región, se convierte en un sitio de suma importancia, debido a una alta idolatría de los mayas, por lo que estos misioneros trataron de combatirla con la fe católica, con la fundación de varios recintos religiosos cristianos, como Lalcah, Sabán, Sacalaca, Chuhunbub y Poolyuc.

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El establecimiento de Sabán por los españoles tuvo como objetivo formar una encomienda y para ello reunieron allí a un gran número de pobladores, pues este lugar tenía cercanía a un antiguo pueblo prehispánico, siendo el primer encomendero Martin de Montalvo y Figueroa, quien la custodió bajo su poderío hasta su fallecimiento en 1764.

Su población en 1795 era de dos mil 559 personas. Era una zona muy grande y habitado de la región solo superado por Tihosuco; en 1805, había 300 familias mayas, 7 de hispanos o criollos, se tiene conocimiento que en esa época había una escuela.

A la ruptura comercial con Cuba y debido a la independencia de México a inicios del siglo XIX, grandes extensiones de tierra se utilizaron para la agricultura dirigiéndose a la caña de azúcar; Sabán fue convertida en un cañaveral productor de azúcar morena, panela y aguardiente para poder surtir un mercado interno y también para exportar estos productos a pueblos y ciudades aledañas.

La iglesia de Sabán sobresale por ser una de las más grandes de la zona de Quintana Roo en la actualidad, la cual está dedicada a San Pedro y ubicada en el corazón del poblado.