Regresa la tensión a In House

Un grupo de habitantes de la zona invadida se armó con palos para ‘defender’ sus predios.

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Un grupo de habitantes de la zona invadida conocida como In House salieron a 'defender' sus predios. (Adrián Barreto/SIPSE)
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Adrián Barreto/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- Armados con machetes, palos y piedras, así fue como defendieron habitantes los predios en una de las secciones de la invasión de In House durante este fin de semana, cuando la disputa por un pedazo de tierra generó una tensión que por momentos creció, aún con la presencia de la Policía.

Durante la mañana de este domingo, al filo de las 11:30 de la mañana, la Policía Municipal recibió una llamada de auxilio por una confrontación entre dos grupos de personas. Cerca de 15 policías arribaron a la parte central de la zona invadida, una de las tres secciones en las que se dividieron los grupos de “paracaidistas”.

Durante cerca de una hora rondaron el lugar y dialogaron con personas que portaban machetes, piedras y palos, quienes reclamaron la posesión de cerca de 26 predios. Ese grupo fue señalado por el resto de la comunidad de haber ingresado en las últimas semanas amedrentando a algunos para quitarles los terrenos que ya habían sido repartidos por una persona identificada como Enrique Basto.

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“Los que están allá con los machetes son personas que llegaron hace unas semanas, primero llegaron unos y fueron trayendo a otros pero son una bola de maleantes; ya le invadieron al pastor el templo, y lo malo que no se puede dialogar con ellos porque todo el tiempo andan amedrentando con machetes”, dijo una de las personas a las que le despojaron del terreno que le había dado Basto, a cambio de 2 mil pesos.

Provienen de otra zona invadida

De acuerdo con versiones recogidas, el grupo en cuestión proviene de otra invasión, la de las torres de la Comisión Federal de Electricidad CFE: “están liderados por uno que le dicen el “Latin Lover”, pero llegaron de otra invasión para quitar terrenos y luego ellos los venden y hacen negocio de ahí”, argumentaron algunas personas que forman parte de otro grupo que lidera Julio Cano, conformado por 430 familias.

Julio Cano, por su parte, dijo que su agrupación, una de las más grandes que están en la primera sección colindante con la zona de conflicto de ayer, descartó que la gente que a él lo sigue esté inmersa en las disputas por la tierra.

“Aquí con nosotros no ha ingresado nadie, somos gente pacífica, y mientras no se metan con nosotros y no se pasen para acá no vamos a tener problemas”, declaró Cano.

La policía no capturó a nadie, pero su presencia apaciguó los ánimos durante este domingo. Entre los curiosos que se acercaron a ver la interacción entre la policía y uno de los grupos en conflicto, se mezclaron elementos de la Policía Judicial, que acudieron a peinar igualmente la zona.

Algunos habitantes aseguraron que pedirían la intervención del secretario general del Ayuntamiento, Juan Carlos Pereyra Escudero, para evitar que la tensión crezca.

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