Miguel Maldonado/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Una pésima decisión de los jueces chetumaleños Alberto Galera y Carlos Escobar, le dio el triunfo al brasileño Marcondes Bastos sobre el gladiador de la ciudad de Chetumal, Sergio Rosado Pérez, dentro de la polémica función de Artes Marciales Mixtas que se llevó a cabo la noche del miércoles.

El salón Bellavista, de esta ciudad capital, fue el escenario donde la noche del miércoles se llevó a cabo la función de esta disciplina conocida también como Vale Todo, y en la que el platillo principal era la contienda por el cinturón del Mexican Fight Championship, protagonizada por el chetumaleño, Sergio Rosado Pérez y el brasileño Marcondes Bastos.

Después de un atraso de tres horas el evento inició y llegó el momento de la contienda estelar, y los dos combatientes subieron al hexágono con la mirada fija en el cinturón, completamente concentrados y motivados por esta oportunidad.

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La batalla inició y de inmediato se presentó un espectacular intercambio de golpes entre estos dos peleadores que no dieron oportunidad de respiro.

Después de varias patadas a las costillas y certeros golpes a la quijada del rival, el chetumaleño, Sergio Rosado, controló a su rival y lo llevó a la reja, donde ambos intercambiaron golpes, aunque ninguno que fuera contundente y causara mayor daño.

El brasileño cometió algunas violaciones al reglamento como sujetarse de la reja para inmovilizar a su rival, aunque esto fue ignorado tanto por el referee como por los mismos jueces, a pesar que tanto público como entrenadores lo señalaron al momento.

Ahí comenzó a notarse de qué lado se inclinarían las cosas por parte del jurado y a pesar de ello el chetumaleño mantuvo cierto dominio sobre un gladiador amazónico que ofreció muy poco.

Las cosas llegaron hasta el tercer episodio y para este momento la pelea era claramente inclinada a favor del anfitrión.

En el último suspiro de la batalla el brasileño Bastos conectó un golpe en el rostro y esto, sumado con agua en la lona, provocó que el chetumaleño cayera y justo antes de que fuera golpeado terminó la pelea.

Todo mundo dio por vencedor al chetumaleño Rosado Pérez; sin embargo, de manera increíble, los jueces chetumaleños Alberto Galera y Carlos Escobar, inclinaron a favor del brasileño, que finalmente se colgó el cinturón.

Posterior a la pelea, el gladiador derrotado acusó directamente al promotor deportivo, Gabianno Mota, brasileño, por cierto, de dar la instrucción a los jueces para favorecer a Marconde Bastos.

Esta situación fue reprobada por el gladiador profesional de la UFC, Martín Bravo, quien se dijo decepcionado por estos actos ilegales.

“Es una decepción ver que ocurran este tipo de cosas, es por ello que este deporte no crece, porque se siguen cometiendo actos de corrupción para beneficio de los promotores”.