Redacción/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La mejor manera de prevenir el dengue y el chikungunya es no fomentar ambientes en donde se reproduzca el mosquito Aedes Aegypti, que transmite dichas enfermedades, sin embargo cuando esto no es suficiente también se puede evitar ser ‘apetecibles’ para estos insectos a través de la dieta.

Las autoridades de Quintana Roo mantienen una campaña de descacharrización mediante la cual se eliminan recipientes que pueden servir de criaderos de mosquitos, pues tan solo en una corcholata pueden nacer entre 500 y mil mosquitos.

Sin embargo si además de prevenir la formación de larvas de mosquitos quieres evitar ser víctima de estos insectos, entonces debes ingerir más vitamina B1, también conocida como tiamina.

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De acuerdo con el portal vitaminas.org.es la vitamina B1 ayuda a la correcta salud de los tejidos y por ende favorece a la epidermis. Por eso, si sufres de picaduras de mosquitos pero tienes  un buen contenido de vitamina de tipo B en el organismo, seguramente los sufrirás menos. 

Por otro lado, no está comprobado aún pero se está estudiando la posibilidad de que tomando suplementos de tiamina se puedan repeler los mosquitos; esto debido a que la vitamina B1 es una de las pocas que se eliminan a través del sudor y, según dicen los especialistas, a estos insectos no les gusta para nada el olor que desprende la tiamina.

Alimentos que la contienen

Es muy fácil de encontrar por lo que a veces no resulta necesario tomar tiamina como un suplemento dietario, basta con tener una dieta balanceada y equilibrada.

En el reino animal la tiamina está en todos los cortes de carnes tanto vacunas, como en el pollo, en el pescado y hasta en el cerdo. 

Los cortes con mayor cantidad de vitamina B1 son los de carne de cerdo y el hígado de res, ambos presentan una cantidad más que razonable de esta vitamina.

Cereales, fuente importante de tiamina

Por otro lado, en el mundo vegetal las mejores fuentes de tiamina  son los frutos secos que también contienen vitamina B3, pero en general la vitamina B1 se encuentra presente en la mayoría de las frutas y verduras. 

Los frutos secos, los cereales integrales y sus derivados, chícharos, naranjas, papas, coles de Bruselas y espárragos. Los cereales refinados en el proceso pierden todo su contenido de vitamina b1.