Niño quemado tras descarga eléctrica lucha por recuperarse
Después de una valoración se determinará si viaja a Galveston, Texas, para una nueva intervención.
Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Ricardo viajó a la Ciudad de México, en compañía de su madre y hermana para consulta médica en la que se determinará si requiere de una nueva cirugía en el brazo y pierna derecha que resultaron con quemaduras de segundo y tercer grado tras una descarga eléctrica en agosto de 2014.
Roxana Martínez Torres, vocal de la Fundación Michou y Mau, informó que después de una valoración en la Ciudad de México se determinará sí es necesario hacer un nuevo viaje a Galveston, Texas, Estados Unidos para una nueva intervención.
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“Este niño resultó con quemaduras el año pasado, tras un accidente con cables de alta tensión, cuando se encontraba en el techo de su domicilio, ayudando a su papá en trabajos de plomería, donde resbaló y al sostenerse de un cable de alta tensión resultó con quemaduras en la mayor parte de su cuerpo”.
Primer viaje a Texas
Recordó que el primer viaje de Ricardo a Galveston fue de emergencia y posteriormente fue necesario hacerle una intervención más, además de las citas médicas a la Ciudad de México, todas con apoyo de la fundación que representa.
De manera paralela, dijo se llevó a una niña (no proporcionó datos generales) a la Ciudad de México para un tratamiento de seguimiento, en quemaduras de su cuerpo que ocurridas desde hace dos años.
“Cuando los niños sufren quemaduras de pequeños, es necesario darles un seguimiento puntual, conforme al crecimiento de estos, porque la piel se estira”.
Martínez Torres señaló que en lo que va del año, la Fundación ha realizado el traslado a la ciudad de México y Galveston a seis menores con quemaduras de tercer grado.
“La mayoría de las quemaduras de los niños son por agua caliente. En esta época de frío es muy importante que las mamás que acostumbran a calentar el agua para bañar a los niños estén muy al pendiente y tengan mucho cuidado”.
De acuerdo con las estadísticas del año pasado, donde se realizaron 16 traslados de emergencia al hospital de la ciudad del México y el extranjero, el número de niños con quemaduras ha disminuido considerablemente.