Alejandra Carrión/ SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- De 800 pequeños comerciantes de Othón P. Blanco solo 200, es decir, el 25%, no pueden cumplir con el pago de luz, agua y licencias de funcionamiento; el resto se encuentra en números rojos.

Cesar Antonio Iuit,  secretario general de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC) en Othón P. Blanco, indicó que los desmesurados gastos que se tienen cada año, están ocasionando que los comercios agonicen para poder cumplir con sus trámites de inicio de año.

También te puede interesar: Issste no paga: pacientes con cáncer olvidados en terminal de autobús

“En estos momentos estamos padeciendo la cuesta de enero, febrero y vamos por la de marzo, no hay un incremento de las ventas como nosotros habíamos pensado”, dijo el entrevistado.

Indicó que las bajas ventas, está ocasionado que el 75% de los agremiados  no cumplan con sus trámites de rigor como lo marca la Ley como son tramites de licencia de funcionamiento por los altos costo de operación a los cuales se están enfrentando.

“Tenemos que buscar la manera de cómo cumplir ya sea por medio de préstamos o que el municipio nos pueda dar prorroga de lo contrario tendrán que bajar sus cortinas definitivamente”, resaltó.

Indicó que en lo que va del año, han cerrado seis comercios por no poder cumplir con sus gastos de operación y el gasto de sus trámites.

Explicó que por ejemplo, una tienda de abarrotes tiene que invertir hasta mil 200 pesos en realizar trámites de funcionamiento, un minisúper hasta siete mil pesos y cualquier taller hasta dos mil 500 pesos, aunado a la luz y agua que tienen que pagar en este primero bimestre del año.

Empleo formal e informal

Del total de agremiados a la CROC, el 46% se dedica al ambulantaje, mientras que el 56% se dedica a labores relacionadas con el empleo formal e informal de manera fija, es decir que reciben un salario por la venta de ropa, calzado o bisutería.

Desde el 2014, inició el cierre recurrente de comercios por la falta de recursos para solventar sus gastos. Ese mismo año cerraron sus puertas 20 establecimientos afiliados a la CROC en el primer trimestre, mientras que en 2015 fueron 15; en el 2016, fueron 18 y en lo que va del 2017, han cerrado seis establecimientos sin llegar al primer trimestre.