Paloma Wong/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La Dirección Municipal de Protección Civil en Othón P. Blanco ha detectado seis puntos de venta de pirotecnia a través de las redes sociales, tres son de producto prohibidos, al parecer sin permiso.

Juan Manuel Zamarripa Pérez, director del área, informó que han detectado la venta de pirotecnia en redes sociales, que serán ubicados para confirmar que tengan permiso. De lo contrario el producto será decomisado.

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“Haremos vigilancia en este sentido en coordinación con Vía Pública. En este caso si los pescamos sin permiso o sean explosivos como petardos, palomitas u otros se les va a decomisar y será turnado como una falta administrativa a la Policía Municipal”, comentó.

Para evitar la venta clandestina, que puede poner en riesgo a las familias en caso de explosión, exhortó a los ciudadanos a reportar vía 066 o 072 los puntos de venta con este producto prohibido.

Vendedores ambulantes

A dos días de comenzar con la venta del producto, explicó que han otorgado 50 permisos, lo que refiere a que en la ciudad deben circular 50 vendedores ambulantes de pirotecnia no explosiva, es decir, sólo deben contar con luces de bengala.  El permiso tiene un costo de 400 pesos, cantidad que no tuvo un incremento en comparación con el año pasado.

Asimismo, Zamarripa Pérez indicó que solicitarán a la ayuda de la Policía Estatal para la revisión de vehículos en los diferentes retenes, pues parte del producto llega de la Ciudad de México y Guatemala. 

“Hay retenes de la policía y son ellos los que deben detectarlo, incluso pediremos el apoyo en este sentido para su detección, pues deben tener un permiso de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) para su transporte”, puntualizó.

Indicó que la venta de pirotecnia durante diciembre no puede ser prohibida, por lo que es mejor regularla para evitar una afectación mayor, que en caso de haber una explosión del producto, puede afectar a otras familias.

El director de Protección Civil, recomendó a los padres de familia que compren la pirotecnia para sus hijos vigilarlos mientras que las prenden, a fin de evitar accidentes lamentables, donde los menores de edad pueden quemarse.