Ernesto Neveu/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Un predio ubicado en costas del sur de Quintana Roo y en el que se construía un área de cabañas turísticas fue clausurado ayer por personal de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), tras encontrar una extensión importante de manglar rellenado a propósito de ganar más terreno. Lugareños afirmaron que el lote de alrededor de 500 metros cuadrados es propiedad del actual presidente municipal de Tulum, Martín Cobos Villalobos.

En el sitio, ubicado a orillas del mar Caribe, en el kilómetro 13 del camino El Uvero-Pulticub, se aprecian varias estructuras de madera, pero con una importante superficie de mangle, muy cerca de una laguna aledaña, totalmente destruido, provocando un desvío del camino costero original, en dirección hacia el norte.

De acuerdo con los datos aportados por varias personas que habitan en la zona, la construcción de cabañas y el trabajo de relleno ya lleva varios meses y se ha dado en llamar al sitio Los Tres Amigos, pues, además de Cobos Villalobos, se manejan los nombres de David Palma y el ex alcalde de Tulum, Marciano Dzul Caamal, si bien no se ha confirmado la participación de estos dos últimos personajes.

La molestia de los lugareños radica precisamente en que los supuestos inversionistas pasaron por alto todo tipo de normatividad, atentando de manera severa en contra del equilibrio ecológico de la zona.

Una vez hecha pública esta denuncia ciudadana a través de las radiodifusoras de Grupo SIPSE, personal de la Profepa acudió de inmediato al sitio para constatar el nivel de destrucción realizado y, al no hallar quien presentara estudios de impacto ambiental y demás permisos en ese momento, procedieron a la clausura del lugar.

La gente que comúnmente transita por la zona, parte de la costa del sur de Quintana Roo que se mantiene prácticamente virgen, por la escasa población y actividades turísticas nulas, expresó que a ese ritmo de destrozos y relleno de manglares, el camino para continuar hacia Pulticub y Punta Herrero tendrá que dar la vuelta por atrás de la laguna.

Por lo pronto, el asunto ya está en manos de la autoridad federal en materia ambiental y habrá que esperar a que la contraparte presente la documentación, en su caso, que avale el relleno de manglar y la construcción de cabañas en costas del sur del estado.