Jorge Carrillo/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Dentro de la Cruzada Nacional Contra el Hambre, la Comisión Nacional Forestal (Conafor), distribuyó 8.9 millones de pesos en el Estado, 3 millones de pesos más con relación al año pasado, destacó en entrevista el gerente estatal de la institución en Quintana Roo, Rafael León Negrete, quien detalló que dichos recursos ya fueron canalizados en su totalidad a los productores, quienes realizaron acciones de promoción y prevención de incendios forestales.

Abundó que en el municipio de Othón P. Blanco en total se beneficiaron 21 comunidades y mil 250 campesinos, quienes realizaron la limpieza de guarda rayas, brechas cortafuego y de todas las áreas a su cargo donde se pudieran generar siniestros, lo que finalmente coadyuvó a que este año la temporada de siniestros no fuera tan intensa.

El funcionario agregó que de acuerdo con las nuevas reglas de operación, los recursos se depositaron directamente en sus cuentas bancarias y aclaró que si algunos de los campesinos tienen problemas en sus depósitos, se debe a que no han activado sus respectivas tarjetas, trámite que deben realizar directamente en los cajeros automáticos para acceder directamente al efectivo.

León Negrete estableció que en esta temporada continúan realizando acciones dentro de los programas de asignación de recursos, y citó como ejemplo que en estos momentos tienen abiertas las ventanillas para el Programa Especial de la Península, que está encaminado a la disminución de emisiones por deforestación o degradación, entre otros, dedicados a la conservación y restauración y de producción y productividad de recursos forestales.

Asimismo, dijo que están abiertas las ventanillas para el Programa de Fortalecimiento de Organizaciones Forestales, y el apoyo a proyectos de capacitación y transferencia de tecnologías forestales.

Recordó que el convenio que firmó el Gobierno del Estado con la Dirección General de Conafor, fue por el orden de los 158 millones de pesos para el presente ejercicio; sin embargo, no dudó que se cerrará con una inversión cercana a los 230 millones de pesos, luego de que se soliciten ampliaciones como comúnmente se realiza en cada ejercicio fiscal.

Existen dos tipos de origen de los incendios forestales: natural y antrópico. En el primer tipo, la ocurrencia deriva principalmente de rayos producidos por tormentas eléctricas, durante períodos de escasez de lluvias. Cuando el origen es antrópico, situación mayormente presente en Quintana Roo, ocurren por descuido o negligencia de los labriegos, que usan el fuego con fines de cultivo.