Juan Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Con una inversión de 16 millones de pesos, ayer se llevó a cabo el acto protocolario del Primer Rastro de Aves en el Estado, Tipo Inspección Federal (TIF), se prevé sacrificará más de 10 mil aves por turno.

Manuel Vera Medina, gerente estatal del Fideicomiso de Riesgo Compartido (Firco), detalló que esta institución aportó, a fondo perdido, cuatro millones de pesos; la Financiera Nacional de Desarrollo Agrícola Forestal y Pesquero, otorgó un crédito de seis millones de pesos y el grupo Procesadoras de Aves de Chetumal, con capital propio, aportó seis millones más.

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El rastro está ubicado sobre la carretera federal Chetumal-Cancún, a la altura de Centro de Control, Comando, Cómputo y Comunicaciones (C4) en el municipio de Othón P. Blanco, incluso, lleva un avance del 20% en cuanto a infraestructura.

“Esta infraestructura viene a dar un punto importante al manejo de las carnes que se consumen en Quintana Roo, principalmente en Chetumal. De acuerdo con la demanda, entonces aumentara sus operaciones”, indicó.

Destacó que al ser un rastro TIF, permitirá atraer otras inversiones para la región, tales como fábrica de alimentos, incluso, granjas avícolas que generará una mayor derrama económica al sur del Estado.

Jorge Ismael Romero Sierra, representante del grupo Procesadoras de Aves de Chetumal, manifestó que lleva muchos años luchando por conseguir la construcción del rastro para aves, inquietud que nació desde que tenían sus propias granjas de engorda y tenía el problema de comercialización.
Trabajarán de la mano con autoridades sanitarias para garantizar productos de calidad, cumpliendo con las normas.

En su oportunidad, la Dirección contra Riesgos Sanitarios, aceptó que son insalubres, pero el municipio cobra por ese derecho mil 400 pesos anuales a los 15 rastros de traspatio que existían hasta 2015, donde se estima se realiza la matanza de alrededor de 23 mil pollos, pues de otra manera los chetumaleños se quedarían sin producto.