Comienza el ritual del caracol chivita para depositar huevecillos

Cada vez tienen que recurrir a los lugares apartados para conservarlos.

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Es posible encontrar caracolitos de 4 a 55 milímetros de longitud. (Javier Ortiz/ SIPSE)
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Javier Ortiz/ SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Las zonas alejadas, donde casi no llega la gente, se están convirtiendo en los únicos espacios que ocupa el caracol chivita para depositar sus huevecillos, pues por lo general en las zonas cercanas a los balnearios cada vez es más difícil observarlos, como ocurría hasta hace algunos años, cuando su comercialización se convirtió en negocio.

Manuel Alfredo Chí López, director de Ecología Municipal, indicó que ha comenzado el ritual de esta especie que cada año ocupa la Laguna de los Siete Colores para depositar sus huevecillos, sin embargo, cada vez tienen que recurrir a los lugares apartados para conservarlos, ya que en la zona norte hacia Buenavista y Pedro A. Santos, se han observado especies de gran tamaño.

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Más no ocurre lo mismo hacia la zona contraria, es decir, del balneario ejidal hacia dirección del Cenote Azul, donde por lo general acude la gente a bañarse, por la cantidad de balnearios, hostales y hoteles que se encuentran establecidas en esa área y que ocasiona que sean destruidos por los bañistas.

Recordó que estudios de Ecosur, determinaron que se pueden encontrar con más facilidad en esta área del cuerpo lagunar y no por la zona contraria. De acuerdo con los estudios, la baja densidad de la población es a razón de 0.6 a 0.8 y hasta de 1.2 en algunos sitios, como en la costa oeste donde abunda más que en la costa este de la Laguna de Bacalar, es decir, hay mayor población de caracoles del balneario ejidal hacia el norte.

Extracción masiva

Dijo que en la actualidad, es posible encontrar caracolitos de 4 a 55 milímetros de longitud de concha, a diferencia de hace algunos años,  cuando aún se podían encontrar de 70 milímetros, o sea, siete centímetros de concha, pero debido a la extracción masiva que frenan su desarrollo, cada vez es más difícil observarlos.

Consideró que sólo permanecen los caracolitos que se encuentran en zonas alejadas de los balnearios públicos, ya que por lo general, es costumbre de los bañistas entretenerse capturando la especie dentro de la laguna mientras disfruta de las cálidas aguas y que al final terminan llevando a su lugar de origen.

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