Paloma Wong/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Alrededor de 100 clérigos de la Prelatura Cancún-Chetumal renovaron sus votos sacerdotales durante la Misa Crismal, en la que también el obispo, Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, bendijo el aceite de los Óleos y el Santo Crisma.

Más de 500 personas se congregaron la noche de ayer en la catedral del Sagrado Corazón de Jesús en Chetumal, para participar en una de las celebraciones eucarísticas más importantes de la iglesia católica.

Durante la homilía, Elizondo Cárdenas hizo el llamado a los párrocos a ser una misma figura de Jesucristo, así como ser una iglesia en salida misionera.

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“No somos franco dependientes, sino que somos unidos formando el cuerpo de Jesucristo. La iglesia es el espíritu viviente de Cristo en nosotros, por eso debemos ser auténticos y coherentes”, comentó.

Bendijeron los óleos 

Después del sermón, el obispo realizó la renovación de los votos de los sacerdotes, posteriormente llevó a cabo la bendición de los óleos (Catecúmenos y de los Enfermos) y el Santo Crisma.

El óleo de los catecúmenos sirve para ungir a los que van a ser bautizados, significando con ello que Jesucristo les da la fuerza necesaria para enfrentarse a tantas inclinaciones contrarias al espíritu de Dios, y con las que tendrán que luchar para ser verdaderos cristianos.

El óleo de los enfermos sirve para los que están viviendo el misterio del dolor físico, y en particular, para los que están en grave peligro de morir.