Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Después de que cerca de 700 personas fueron desalojadas la madrugada de ayer por unos 450 elementos de la Policía Municipal, Estatal y Policía Judicial, por la mañana unas 100 personas se reagruparon e intentaron tomar las viviendas y terrenos, pero fueron exhortados por la policía a que no lo hicieran o de lo contrario serían detenidos, pese a ello fueron arrestados tres hombres y dos mujeres por dañar una motopatrulla y arrojar piedras a policías al intentar obstruir la avenida Costa Maya.

El desalojo en la madrugada fue encabezado por el gobierno municipal, previo a este, la noche del jueves funcionarios y policías preventivos se presentaron en la zona para realizar un censo y ver cuánta gente había en el lugar.

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Entre los funcionarios estaba José Luis Castro Garibay, director de Transporte y Vialidad, quien comunicó a los invasores que el gobierno está preocupado por ellos y que podrán quedarse con uno de los predios, y les pidió el total de personas en el lugar.

Con el censo que hizo Seguridad Pública determinaron el número de elementos para el operativo de desalojo, incluso se solicitó el apoyo de la Policía Municipal de Solidaridad.

A las 3:40 horas empezaron a llegar los contingentes de elementos policíacos, la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) llevó 90 agentes de la Policía Judicial del Estado (PJE), dos agentes ministeriales, dos oficiales secretarios, dos peritos, cuatro directores, los cuales fueron encabezados por Ludwig Vivas Arjona, subprocurador de Justicia de la zona norte.

Los uniformados con equipo antimotines ingresaron a los predios e informaron a los invasores que tenían que desalojar o de lo contrario serían detenidos.

Las personas ya presentían que iban a desalojarlos, no se opusieron, tomaron sus pertenencias y salieron de la zona, algunos vehículos que estaban en el lugar, entre ellos taxis de Cancún e Isla Mujeres, fueron sacados en grúas.

El operativo de desalojo duró cerca de una hora, después unos 40 elementos se quedaron resguardando el lugar para que la gente ya no ingresara a las viviendas.

Del centenar de personas que acudieron ayer, algunos decidieron cerrar la avenida Costa Maya alrededor de las 16:30 horas, la policía lo impidió y los invasores comenzaron a aventarles piedras, al final fueron detenidas dos mujeres y tres hombres, por ultrajes, portación de arma blanca, y daños a una motopatrulla. La policía continúa resguardando el lugar.

Les pidieron dinero a los invasores

Alejandro López Díaz, subsecretario de Seguridad Pública municipal, dijo que las personas se quejaron porque pagaron de 500 a tres mil pesos por una vivienda a invadir.

Gilberto es padre de tres niñas y pronto va a nacer su cuarto hijo, es hojalatero, no tiene un lugar donde vivir, alguien le dijo que estaban invadiendo casas en el fraccionamiento Azul Bonampak, la necesidad lo hizo tomar uno de los predios, él fue uno de los desalojados.

“Deberían dejarnos que los ocupemos y se los pagamos poco a poco, además de que se vuelve un nido de malvivientes el que esté abandonado el fraccionamiento”, dijo Gilberto.

Su esposa, con cinco meses y con un embarazo de riesgo, tuvo que ser valorada por paramédicos de la Cruz Roja, porque se empezó a sentirse mal cuando se llevó a cabo el desalojo.

Solo sufrió una crisis nerviosa por los hechos, fue lo que le dijo a Gilberto un médico de la corporación policíaca. El padre de familia con sus tres hijas y su esposa caminaron con dirección a Villas Otoch donde vive un familiar para pedirle posada, después pensarían donde ir a rentar.

Los detenidos son Miguel N, Griselda N, Divisa N, Alexis N y Jorge, en agravio de los policías Víctor N, Roberto N y Horacio N.