Sedena seguirá construcción de hotel en la laguna de Bacalar, pese a protestas
La obra se realizará porque cumple con los requisitos establecidos por la Semarnat, el INAH, y el Ayuntamiento de Bacalar.
A pesar de las protestas por parte de grupos ecologistas y ciudadanía, la construcción del hotel que realiza la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a la orilla de Bacalar continuará.
La información se reveló tras la reunión entre autoridades de los tres niveles de gobierno con mandos militares de la Sedena en Bacalar.
Carlos Mendoza Gutiérrez, vocal del Consejo Ciudadano del Comité de Planeación de Bacalar, señaló que la obra se realizará porque cumple con los requisitos establecidos por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), así como los establecidos por el Ayuntamiento de Bacalar.
“El proyecto está hecho por arquitectos militares y la cuestión hidrológica de la laguna se está respetando, y lo que se logró fue que la dimensión de la maquinaria que la Sedena utiliza sea pequeña por la vibración que transmite al Fuerte de Bacalar”.
Indicó que en la mesa de negociación se planteó la construcción de la barda, que según los manifestantes es una barda muy alta que impedirá la vista clásica de la Laguna de los Siete Colores, el Canal de los Piratas y el Fuerte de San Felipe.
Expresó que tras mucha negociación, los mandos militares dijeron que el planteamiento de la barda será llevado a la Ciudad de México en busca de una respuesta favorable.
En el sitio se pretende construir un lugar de descanso para los altos mandos de la Sedena, por lo que las autoridades militares indicaron que se necesita seguridad en el sitio.
Tras la reunión se supo que será un edificio de un solo piso y no de dos como se especuló desde el inicio de las protestas, solamente que con mejor infraestructura, con una dimensión de aproximadamente 25 metros por 25 metros y la altura original que actualmente tiene la estructura que se mejora.
Al terminar la reunión, Cristina Torres Gómez, secretaria de Gobierno de Quintana Roo confirmó que se continuará con la construcción que la Secretaría de la Defensa Nacional realiza a la orilla de la Laguna de Bacalar, pero sin entrar en detalles.
“Estamos trabajando en comunicación con la ciudadanía, quedó muy claro que al principio fue un tema de información, ya se aclaró, se les mostraron los diseños y todo lo relacionado al proyecto y estoy segura que se darán cuenta que es un trabajo en sinergia y evidentemente, por la naturaleza de las instalaciones no se podía hacer de conocimiento público”, expresó la encargada de la política interna del Gobierno del estado.
Por la mañana del lunes, Érika Ramírez Méndez, directora de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) en Quintana Roo, informó que en conjunto con la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) se analizará el tema y en su caso, determinar responsabilidades por la posible afectación a la llamada “Laguna de los Siete Colores” a causa de la construcción de un hotel en un predio junto al cuerpo de agua por parte de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y denunciada a través de redes sociales por la sociedad civil y agrupaciones ambientalistas.
Desde hace dos semanas la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) construye un edificio a las orillas de la Laguna de Bacalar, frente al Fuerte de San Felipe, sin consulta ciudadana previa, y recientemente clausurado simbólicamente por grupos sociales y civiles de la ciudad de Bacalar, pidieron respeto al ecosistema y respetar la ley a la Sedena.
La tarde de este lunes, un grupo de personas, en su mayoría extranjeros realizó otra protesta por las obras de construcción que realiza la Sedena en predio.
Los manifestantes señalaron que la Sedena rellena impunemente, sin permisos ni manifiesto de impacto ambiental, por lo que urge que alguien les ponga freno. En el sitio, se observan camiones de volteo con material de construcción que dejan caer a orillas de la Laguna de Bacalar.
En tanto, organizaciones civiles interpusieron una denuncia ante la Profepa, ya que afirman que la construcción se realiza con permisos que incumplen con la las leyes ambientales.