Benjamín Pat/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- La sequía registrada a mediados de este año provocó la pérdida de 24 mil hectáreas de milpa en los municipios de Othón P. Blanco y Bacalar, confirmó la Secretaría de Desarrollo Agropecuario y Rural (Sedaru).

Se trata del 80 por ciento de las 30 mil 100 hectáreas de maíz y frijol que se siembran cada año en el sur del estado en cada periodo primavera verano, de acuerdo con Luis González  Flores, titular de la Sedaru.

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Según las cifras estimadas, en el municipio de Othón P. Blanco se cultivaron alrededor de 16 mil 700 hectáreas de maíz y frijol, de las cuales, cerca de 13 mil 300 se perdieron por la falta de lluvias.

En lo que respecta al municipio de Bacalar la superficie cultivada fue de 13 mil 400 hectáreas y cerca de 10 mil 700 se siniestraron por la intensa sequía.

Recuento de los daños 

La verificación de daños se realizó a manos de personal de la empresa Agroasemex, la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), de los municipios y la propia Sedaru.

“Estamos esperando que los directivos de Agroasemex nos envíen los resultados de todo el estado y eso deberá será en los primeros días de diciembre”,  mencionó González Flores.

También será en los primeros días del próximo mes cuando comiencen a fluir los recursos económicos correspondientes a las indemnizaciones, y que serán entregados de manera inmediata a los campesinos.

“Tuvimos una reunión con Eduardo Espinosa Abuxapqui, presidente de Othón P. Blanco para empezar a coordinar la entrega de los recursos en el momento que nos llegue. Insisto eso deberá ser la semana próxima”, indicó.

Más afectaciones

En el caso de los municipios de Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos, Tulum y Lázaro Cárdenas, en breve se dará a conocer la superficie afectada por las sequías.

En esas cuatro demarcaciones se cultivan cada año alrededor de 45 mil 460 hectáreas, principalmente en Felipe Carrillo Puerto y José María Morelos.

Durante el ciclo primavera verano de 2014, también se registraron pérdidas en el campo quintanarroenses y que fueron indemnizadas con un pago de mil pesos por hectárea.