Carlos Castillo/SIPSE
RÍO HONDO, Q. Roo.- Desde mediados de noviembre inició la venta libre de “bombitas”, incluyendo petardos, en la ribera del Río Hondo, provocando que menores de edad manipulen este tipo de explosivos ante la falta de vigilancia y regulación, denunció José Laynes Méndez, representante de la Comisión Nacional de Emergencia (CNE), en la zona cañera.

Dijo que la, pre celebración de Navidad y Año Nuevo podría convertirse en una tragedia ante el uso desmedido, sin protección y prevención adecuada de la pirotecnia, más cuando su venta es indiscriminada.

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Y en la ribera del Río Hondo existen 14 comunidades rurales y en cada una de ellas existen dos o tres personas que venden “bajo el agua” pirotecnia, algunos comercializados con vista al público en los negocios de abarrotes, mientras que otros lo venden en viviendas particulares.

Señaló que aunque esto debería encender los focos rojos de atención para que se prohíba el uso o se regule de forma correcta y estricta, hasta el momento no hay ningún tipo de operativo y mucha gente almacena por kilos la pirotecnia.

“Desde hace 15 días se detectó casi en todas las comunidades rurales de la zona cañera que las tienditas y comercios venden pirotecnia como cebollitas, petardos, cerillitos, chifladores, bengalas, volcanes, entre otros, que dijo podrían causar quemaduras de segundo y tercer grado e inclusive lastimar un miembro o volar un dedo”.

Y no hay precaución muchas veces ni de los padres ni de quién lo vende que a veces ofrecen a niños de hasta cinco años, y la falta de supervisión podría arruinar la celebración y se puede convertir en tragedia, además de provocar daños a la salud, y se elevan las posibilidades de provocar incendios, comentó.

Las medidas de seguridad que marca la ley para el almacenamiento, distribución y venta de la pirotecnia son inadecuadas para el manejo de la pólvora, pues aseguró la mayoría de los comercios lo tienen debajo del mostrador o arriba de los enfriadores, siendo cuestión de tiempo para que se presente algún accidente.

Y que la ley debe ser estricta con el uso de pirotecnia, pues ahora, hasta se distribuye por internet, a través de las redes sociales, donde las personas pueden solicitar lo que quieren y de qué precio sin importar si es peligroso para quien lo vende, lo guarda y lo utiliza.

“La responsabilidad y consciencia inicia con uno; que un segundo de supuesta diversión no se vuelva en una eterna tragedia, apenas iniciamos el mes de noviembre y ya existen desde una semana niños que van reventando bombitas rumbo a la escuela, quien lo vende y bajo qué argumentos”, comentó.