Redacción/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Las mesas ubicadas afuera de un bar de plaza Solare estaban ocupadas cuando llegó el comando armado, integrado por aproximadamente ocho sujetos, con fusiles de alto poder y una escopeta. A los clientes les ordenaron agachar la cabeza y después los tiraron al piso.

Los encapuchados sitiaron el perímetro, dos de ellos se fueron contra José N, de 31 años, y F.A.G.E., de 30, son imágenes que grabó una cámara de circuito cerrado instalada en un lugar de la plaza.

F.A.G.E. fue golpeado por uno de los sicarios. El mismo delincuente jaloneó a José y lo arrojó al piso, éste se puso en posición fetal y con la espalda “mirando” a la entrada del local, en ese momento fue golpeado en el rostro con el cañón de la escopeta, y fue cuando se accionó el arma.

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Las autoridades investigadoras no encontraron ningún casquillo, porque el arma larga que portaba el sujeto no tiene el sistema de arrojarlos hacia afuera.

Con el impacto que recibió José, prácticamente a “boca de jarro”, se le destrozó la nariz, mientras que uno de los perdigones se le incrustó en el brazo izquierdo. Después de que se realizó la detonación, el comandó se retiró a toda prisa de la zona.

Las imágenes de la llegada de los sicarios al local se asemejan a una acción de grupos criminales que operan en el norte del país, donde ingresan con armas largas a negocios con toda facilidad y tranquilidad.

Lo que llama la atención del video es que previo a que llegara el grupo, un chiclero caminaba de un lado hacia otro frente a donde se encontraban los clientes del bar, y cuando llegaron los encapuchados, a él no lo obligaron a tirarse al piso, simplemente se retira de la zona.

Las autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) cree que podría ser el mismo grupo armado que lesionó a un habitante de la colonia irregular El Milagro la semana pasada, quien resultó con amputación de tres dedos de un pie por disparo de arma de grueso calibre; también eran varios individuos vestidos de negro, encapuchados y con armas largas.