La vida de una mujer y de sus tres hijos corren peligro debido a un grave error de elementos de la Policía Municipal de Cozumel, quienes no pusieron a disposición de la Fiscalía General del Estado (FGE) al hombre que intentó quitarle la vida.

Familiares de Iris “N”, quien recibió cinco puñaladas y que se debate entre la vida y la muerte en un hospital, denunciaron que el yerno impidió que la FGE actuara y aprehendiera al agresor, quien también hirió a otras dos personas, entre ellas a un menor de edad.

La madre de la víctima recordó que la noche del 16 de mayo acudieron a la FGE para denunciar que la ex pareja de su hija, que había intentado estrangularla, pero el sujeto no fue detenido. También reveló que el sujeto amenazó que cuando salga de la cárcel irá a matarla.

Personal de la FGE dio a conocer que, de entrada, si los uniformados hubieran presentado al detenido por el delito de lesiones y no solo por alterar el orden, se le hubiera iniciado un proceso judicial por lesiones.

Una serie de violaciones a los protocolos establecidos para las mujeres víctimas de agresiones, así como los que corresponden a la cadena de custodia y preservación de evidencia en una escena criminal se dieron la tarde del 20 de mayo en la colonia San Miguel 2.

Caso de violencia fue minimizado

Como se dio a conocer de manera oportuna, en ese sitio una mujer de 22 años y madre de tres pequeños estuvo a punto de morir asesinada a manos de José de Jesús “N”, quien era su pareja sentimental.

De acuerdo con testigos, los gritos que provenían de la vivienda los alertaron, por lo que llamaron al 911. Al llegar, los uniformados encontraron, según datos preliminares, a un hombre bañado en sangre de su víctima y de las heridas que le provocó a su propia madre y hermano, quienes intentaron impedir el homicidio de su “pariente política”.

En conversación telefónica, William N, hermano de la fémina agredida, narró que en la escena del crimen hallaron el cuchillo con el que tres personas resultaron lesionadas.

Al sitio también llegaron elementos de la Policía de Investigación de la FGE.

Pese a toda esta evidencia en contra del agresor, a éste solo se le presentó ante el Juez Cívico, quien consideró una multa de dos mil pesos por alteración del orden, medida que lo pondrá en libertad en 36 horas a partir de su ingreso a la cárcel municipal. Ni la FGE o el ayuntamiento han dado a conocer su postura sobre este caso.

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