Obreros de la construcción tendrán una 'triste' Navidad

El sindicato de la CROC señaló que la reactivación económica no se reflejó con ellos.

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Obreros de la construcción. (Daniel Tejada/SIPSE)
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Aproximadamente 300 obreros de la industria de la construcción en el municipio de Othón P. Blanco pasarán un cierre de año en la precariedad porque la reactivación económica no se reflejó con ellos.

Juan Magno Boran, comisionado de la zona sur del Sindicato de la Confederación Revolucionaria de Obreros y Campesinos (CROC), explicó que el escenario es prácticamente desolador para las familias, a pesar de que la reactivación económica se ha dado en los diferentes sectores productivos.

Recalcó que la falta de fuentes de empleo es porque las obras públicas y privadas no se están generando, derivó en que los obreros carezcan de ingresos monetarios para el pago de los gastos y más ahora en este fin de año que son las festividades decembrinas.

De hecho algunos no tendrán ni para la compra de regalos costosos para sus hijos o familiares, porque apenas podrán costear la cena del 24 y 31 de diciembre, días en que tradicionalmente se celebra con reuniones por la noche.

Mencionó que para que pueda observarse una verdadera reactivación de la situación en general de los más de mil obreros en el municipio, primero se debe habilitar principalmente la obra pública que es cuando requieren en volumen de los obreros, porque son grandes construcciones.

“Estamos viendo que va a ser un cierre de año difícil, pero las familias son las que van a padecer de la austeridad que se tiene en el sector de la construcción porque no tienen los ingresos suficientes para cubrir los gastos decembrinos, sólo queda que se puedan activar las fuentes de empleo”, comentó Magno Boran.

En su momento, Diego Cortés Arzola, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) en Quintana Roo, comentó que ha sido más de un año difícil por la pandemia del Covid-19, porque las actividades económicas se paralizaron, afectando a todos, generando pérdidas millonarias.

Lo más grave es que al no haber actividades productivas, es que se tiene que prescindir de la plantilla laboral, sin embargo se espera que pronto el escenario mejore, así como el tema mayor contratación de las empresas locales.

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