PROGRESO, Yucatán.- Con el inicio de la veda del pulpo, el próximo 15 de diciembre, y la del mero, el 1 de febrero del 2022, el sector pesquero tendrá que recurrir a especies alternativas para solventar el gasto diario de sus hogares.

Pescadores de Progreso reconocieron las bondades de la prohibición, al permitir la reproducción de especies, pues la captura en el Estado gira en torno al mero de talla mediana, cuyo valor comercial es 50 por ciento menor que el grande.

Sin embargo, se espera que en 2022 sea un periodo de carencias y dificultades para los pescadores, ya que al no contar con especies de alto valor (como el mero o el pulpo y en marzo la langosta) provocará que las familias nuevamente pasen carencias.

Pero ante los buenos resultados de la última temporada del octópodo, muchas familias tomaron previsiones para disminuir el impacto en la reducción de ingresos.

La pesca de especies alternativas, comentaron pescadores como Carlos Cano y Miguel Anguas, se basa principalmente en el canané y carito, que tienen buenos volúmenes de captura, pero afirman que por muy buena que sea resulta insuficiente para solventar a toda la flota, aun cuando alcancen un buen precio, ya que se aleja por mucho a la cotización promedio del mero o el pulpo. 

Ante esto, los pescadores indicaron que para el periodo de vedas generales en febrero y marzo de este próximo 2022 deberán buscar la forma de poder subsistir, ya que el apoyo gubernamental a través del programa "Empleo temporal" no resulta suficiente para solventar los problemas que enfrenta la costa.

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