Marie Garnett una mujer que vive en Liverpool, Reino Unido, conto su historia cuando tuvo que decirle a dios a su recién nacida debido a que le fue encontrado un tumor en la cabeza del tamaño de una pelota d golf esto después de dar a luz.

La mujer cuenta que la noticia la desbasto ya que estaba segura que no volvería a ver a su pequeña y a su esposo, sufría de dolores constantes en la cabeza pero nunca imagino que esto era la causa de un tumor, los dolores aparecieron más fuerte una vez que dio a luz al igual perdió el equilibrio.

Desde años Garnett sufría de fuertes dolores de cabeza que era el reflejo de los síntomas del tumor, después de ser sometida a varios estudios fue localizado el tumor cerebral diagnosticado como benigno.

Al  mismo tiempo la mujer le fue encontrada una meningitis por lo que estuvo en un tratamiento agotador.

Antes de su cirugía la mujer recordó aquella despedida con su bebé, le dedico unas palabras al oído diciendo que “cuidara de su papá”.

Durante su operación la mujer conto que fue una tortura, mientras su esposo dijo, "Fue el mejor y el peor año de nuestras vidas, nació nuestra hermosa hija Amelia, pero solo seis semanas después, a Marie le diagnosticaron un tumor cerebral”, dijo su pareja.

Marie logro salir de todas sus operaciones las cuales le dejaron grandes secuelas una de ellas fue el aprender a caminar nuevamente.

 A seis años de sus cirugías tuvo la madre tuvo una lenta recuperación debido al problema de hidrocefalia que le dejo luego de las operaciones por lo que se mantiene con un aparato que ayuda  con la presión del líquido que va a su cerebro.

La mujer ha dicho que podría necesitar otra cirugía pero por el momento dice sentirse plena y feliz con su familia.

Con información de Internet

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