La “marea roja” es un fenómeno que cada vez se presenta de forma más frecuente en aguas yucatecas, por lo cual miles de pescadores han visto afectada esta actividad, con la subsecuente afectación directa a su economía.

Por supuesto, también se trata de un grave problema para los ecosistemas marinos, pues se habla de la muerte de cientos de peces que no pueden sobrevivir cuando estas microalgas invaden el agua que, en esta ocasión, está a unos 35 kilómetros del litoral yucateco.

Son el menos 4 mil hombres de mar, desde los puertos de El Cuyo hasta Dzilam de Bravo, los que han visto afectada su actividad ante la presencia de la “marea roja”, que se ha presentado de forma continua, en periodos de dos a tres años, pues a principios del presente siglo sólo se dio una vez.

En fechas recientes, los hombres pescadores detectaron que a unos 35 kilómetros de los puertos de Río Lagartos, San Felipe y Las Coloradas, había “agua mala” o “marea roja”, que había matado a cientos de peces que quedaron atrapados en ella.

Este fenómeno viene a complicar aún más la difícil situación pesquera, pues se suma a la baja captura del mero, por lo cual los trabajadores de este sector tendrán que suspender temporalmente sus actividades hasta que haya pasado la “marea roja”.

Este fenómeno se trata básicamente de microalgas en altas concentraciones, las cuales causan la muerte de otras especies marinas por el bajo nivel de oxígeno a causa de la mancha en la superficie, así como las toxinas que afectan las escamas de los peces.

El nombre de “marea roja” se debe a que la alta concentración de estas algas logra cambiar el color del agua para darle una tonalidad rojiza, debido precisamente a los pigmentos que poseen esos microorganismos.

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