MÉRIDA, Yucatán.- A más de un año del inicio de la pandemia de Covid-19, Yucatán vive un periodo marcado por nuevas medidas que han de flexibilizado las restricciones de movilidad, paso previo al regreso presencial a clases, que se estima pueda darse en agosto.

Las autoridades de salud anunciaron la Campaña Nacional de Vacunación del 19 de abril al 25 de junio, para fortalecer la protección contra enfermedades como la poliomielitis (incluida en la vacuna en combo hexavalente), a fin de completar los esquemas y evitar rebrote de males en niños que no tengan al día su cartilla de vacunación.

Especialistas destacaron la importancia que hoy en día cobra la inmunización para la prevención de enfermedades y el retorno seguro a las aulas (ya se programó la vacunación contra el Covid-19 a maestros) e hicieron un llamado urgente a los padres de familia para llevar a vacunar a los menores de nueve años a los centros de salud, puestos de vacunación y clínicas de las instituciones de seguridad social.

Según el Censo de Población 2020 del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), Yucatán tenía una población de 362 mil 108 menores de 0 a 9 años de edad: 178 mil 871 eran niñas y 183 mil 237, niños.

“Es indispensable que continuemos con la vacunación regular, debemos asegurarnos que los más pequeños estén al día con sus vacunas. Vacunados y sanos pueden asistir a la escuela con la seguridad de estar protegidos y generar una protección de rebaño para quienes los rodean”, afirmó Salvador Pineda, pediatra y gerente médico de Sanofi Pasteur.

Comentó que los padres pueden llevar a sus hijos, sean o no beneficiarios de alguna institución de salud, ya que es un derecho universal. Y advirtió que es preocupante la caída en las coberturas, lo que ha ocasionado brotes importantes de enfermedades en países de Latinoamérica y otras partes del mundo.

“Muchos niños no han sido vacunados el último año, por lo que el regreso a las actividades habituales los pone en mayor riesgo de contraer enfermedades graves como la poliomielitis, que podemos prevenir y evitar con sólo vacunarlos”, advirtió.

“Cualquier interrupción en la vacunación, independientemente de la causa, dará como resultado niños susceptibles y una mayor probabilidad de brotes de enfermedades prevenibles. Tenemos que completar los esquemas para llegar a la inmunidad de rebaño requerida por las enfermedades que pueden prevenirse”, destacó.

Explicó que en el caso del sarampión y la tos ferina se requiere de una cobertura de entre 90 y 95 por ciento para alcanzar la inmunidad; para la parotiditis o paperas el porcentaje que se necesita es de 90 a 92 por ciento; en la rubéola, de 85 a 87 por ciento, y en la difteria y poliomielitis, entre 80 y 85 por ciento. Esta última, debido al éxito de la vacunación, se encuentra cerca de ser erradicada del mundo.

“Gracias a la vacunación entre los años 1980 y 2018, los casos de tos ferina redujeron 87 por ciento; los de Haemophilus influenzae, 97 por ciento; la influenza redujo en 99 por ciento; la rabia y el tétanos neonatal al 100 por ciento. Entre 200 y 2018, la hepatitis A redujo 62 por ciento y la tipo B, en 38 por ciento. Aún hay retos por enfrentar, por eso no podemos bajar la guardia, debemos seguir completando los esquemas de vacunación en los niños”, puntualizó el médico pediatra.

Por su parte, Francisco Espinosa, médico pediatra y presidente de la Fundación Mexicana para Niñas y Niños con Inmunodeficiencias Primarias, dijo que lavacunación es ampliamente reconocida como una de las intervenciones de salud más exitosas del mundo y una de las mayores innovaciones científicas de todos los tiempos.

Un hito en la ciencia

“Quizá no haya mejor momento que la Semana Mundial de la Vacunación para rendir homenaje a la importante aventura del progreso humano con la ayuda de las vacunas. La gente se ha olvidado de las enfermedades que las vacunas han prevenido, haciéndolas víctimas de su propio éxito”, indicó.

“En el siglo pasado, las vacunas nos acercaron a poner fin a la polio y ayudaron a erradicar la viruela, por lo que la protección de las personas con vacunas seguras y efectivas nos acercan y ayudan a avanzar en el camino hacia un mundo en el que las enfermedades se pueden controlar, erradicar y evitar sufrimiento”, concluyó.

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